Washington. Estados Unidos anunció este jueves más de 150 nuevas sanciones contra individuos y entidades acusadas de ayudar a Rusia a eludir las sanciones que Occidente le ha impuesto desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania en febrero de 2022.

Este nuevo paquete de sanciones es significativo porque se dirige contra individuos y empresas que actúan como puntos de tránsito para el flujo de bienes cruciales para la economía rusa, incluyendo el sector tecnológico y energético, detalló el Departamento de Estado en un comunicado.

“Estados Unidos y sus aliados están unidos en su apoyo a Ucrania frente a una guerra no provocada, injustificada e ilegal de Rusia. Estaremos junto a Ucrania el tiempo necesario”, prometió el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, en la nota.

Las sanciones, anunciadas por los Departamentos de Estado y del Tesoro, están dirigidas a entidades que han ayudado a Rusia a esquivar las sanciones de Occidente en la exportación de energía, en la reparación de sus barcos y en la importación de tecnología, incluyendo microchips y equipos de navegación, que son fundamentales para la guerra.

Entre los sancionados, se destacan cinco empresas de Turquía y un nacional de ese país acusados de ayudar a reparar embarcaciones vinculadas al Ministerio de Defensa de Rusia y de proporcionar a Moscú materiales que podrían usarse para la guerra en Ucrania.

En concreto, el Tesoro especifica que una de las empresas turcas sancionadas, Margiana, ha hecho “cientos” de envíos a dos entidades rusas que habían sido sancionadas anteriormente y que estaban involucradas en el desarrollo de drones para la guerra.

Además, supuestamente Margiana ha enviado a Rusia sistemas de armas que han sido utilizados contra Ucrania, incluyendo el misil de crucero de largo alcance Kalibr, otro tipo de misil de largo alcance llamado Kh-101 y un tipo de dron conocido como Orlan-10 UAV, usado para recopilar inteligencia sobre el terreno.

También fueron sancionadas las compañías finlandesas Siberica y Luminor, a las que Washington acusa de enviar una amplia variedad de productos electrónicos a Rusia, incluidas cámaras para drones y baterías de litio.

Aparte del impacto a nivel internacional, las sanciones también se dirigieron contra sectores claves de la economía rusa.

Entre los sancionados dentro de Rusia figuran una compañía productora de cobre, la Russian Copper Company, y dos importantes productores de automóviles: el estatal Avtovaz y Gaz Group, el mayor fabricante de Rusia.

Las nuevas sanciones estadounidenses podrían provocar la respuesta no solo de Rusia, sino también de Turquía en un momento especialmente delicado en la relación con Estados Unidos, ya que se espera que el parlamento turco ratifique la adhesión de Suecia a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) cuando se reúna a principios de octubre.

Como resultado de la acción de hoy, todas las propiedades e intereses en la propiedad de las personas que se encuentran en Estados Unidos o en posesión o control de las personas de Estados Unidos deben ser bloqueadas e informadas a la Oficina de Control de Bienes Extranjeros.