Orlando, Florida.- Representantes de una decena de organizaciones sindicales y grupos no gubernamentales realizaron una marcha a lo largo de la zona bancaria del centro de Orlando reclamando a la banca que condone la deuda de Puerto Rico, particularmente en este momento de crisis a raíz del golpe del huracán María.

Asimismo, reclamaron ayuda inmediata para socorrer a la Isla que, a dos semanas del paso de este poderoso meteoro, está a punto de enfrentar una crisis salubrista debido a la falta de agua potable, falta de electricidad, ausencia de servicios médicos consistentes, y falta de recogido de desperdicios sólidos, entre otros.

“Puerto Rico no puede en este momento ni tener agua potable para tomar. Entonces, ¿cómo va a poder pagar su deuda?”, le dijo Érika Gómez al grupo de manifestantes minutos antes de iniciar la jornada que culminaría frente a Merril Lynch, uno de los acreedores principales de la deuda isleña.

Esta manifestación se suma a eventos similares que se efectuaron en otras 13 ciudades de Estados Unidos entre las que se destacan  Nueva York, Boston y Chicago, aunque es Orlando uno de los principales enclaves boricuas producto de una ola migratoria que se recrudeció desde el año 2006 cuando la Isla comenzó a experimentar una crisis fiscal de la cual no ha podido salir y que ahora se recrudece con la devastación que dejó dejó huracán.

Se estima que la deuda de Puerto Rico supera los $70 mil millones.

“Queremos que el estado, los condados y el gobierno de Estados Unidos tengan una responsabilidad moral con los ciudadanos de Puerto Rico”, dijo Javier Torres Centeno, portavoz de la organización Organize Florida y que es parte de esta coalición. 

"Mientras que Trump se queja a viva voz que Puerto Rico ha lanzado el presupuesto de los EE.UU." fuera de control ", millones de ciudadanos estadounidenses están sufriendo, sin siquiera la posibilidad de contactar sus familiares", dijo Rubén Sánchez, un jubilado de  la organización sindical 32bj. 

"Puerto Rico ha sufrido durante años los caprichos políticos de Washington que han puesto las necesidades de los bancos codiciosos ante la gente y dejaron la infraestructura de la isla incapaz de lidiar con la tormenta de Categoría 4. Necesitamos alivio inmediato a la deuda y un plan para reconstruir la economía sobre una base de crecimiento y de prosperidad para todos ", agregó.