El Negociado de Ciencias Forenses (NCF) enfrenta una crisis que podría desencadenar en un problema serio de seguridad para la isla debido al exceso de trabajo, falta de personal, problemas de seguridad, hostigamiento laboral e infracción al convenio colectivo, denunció hoy la presidenta de Servidores Públicos Unidos de Puerto Rico, Concilio 95 AFSCE, Anette González.

El gremio llevó a cabo una manifestación al mediodía frente al NCF en la que hizo un llamado al gobernador Ricardo Rosselló Nevares para que intervenga y le devuelva la autonomía al único laboratorio científico que tiene el país el cual enfrenta problemas laborales debido a lo que calificaron como una “mala e incompetente” administración.

González indicó que los problemas comenzaron cuando el NCF fue integrado a la sombrilla del Departamento de Seguridad Pública (DSP) que dirige Héctor M. Pesquera y se agravaron luego del paso del huracán María.

Dijo que Dr. Edwin Crespo, que dirige interinamente el NCF ha delegado en la subcomisionada Mónica Meléndez, quien según denunció González, no cuenta con la experiencia ni el conocimiento para impartirle instrucciones a científicos, médicos, químicos y peritos en diferentes materias.

“El Gobernador tiene que tomar cartas en el asunto, yo sé que tiene una confianza bien ciega en el señor Pesquera…las personas que lo estén dirigiendo deben tener conocimiento de lo que es el instituto y valoren lo que es instituto y trabajen para que tengan todas las herramientas. Sabemos que hay una situación económica en el país, le están quitando casi un millón de dólares en este presupuesto al instituto, mientras le sigan sacando dinero y no le den los recursos aquí vamos a tener un problema de seguridad en el país bien serio”, sentenció González.

Agregó, que los empleados que solicitan su equipo y materiales de trabajo o se niegan a recibir instrucciones que a su juicio están erradas con consecuencias serias, son hostigados para obligarlos a renunciar.

“El hostigamiento laboral y el patrón de intimidación que han recibido desde la llegada del Dr. Edwin Crespo como Comisionado Interino y de la Sra. Mónica Menéndez, como Sub Comisionada es algo inaudito y totalmente injusto. Hemos recibido comunicaciones con amenazas de aplicar medidas disciplinarias, están utilizando las cámaras de seguridad de la agencia para perseguir a los empleados, quieren evitar que los empleados puedan expresarse con los medios noticiosos”, comentó la líder sindical.

Otro de los problemas que confrontan es que por la falta de investigadores forenses y las condiciones de la flota de vehículos por lo que se ha recurrido a las Divisiones de Servicios Técnicos del Negociado de la Policía para que cubran escenas, con un personal que solo tiene dos semanas de adiestramiento lo que a su juicio también rompe la cadena de evidencia. 

Además, planteó que no tienen el control del perímetro y le dan acceso a cualquier oficial que tenga un rango mayor al agente que está a cargo de la escena lo que tiene como consecuencia su alteración.

“Esto es un serio problema, porque estos compañeros no están capacitados para este trabajo. Aquí se pretende que lo que a nosotros nos toca aprender en 2 años de entrenamiento a ellos se les enseñe en 2 semanas y puedan hacer el trabajo. Eso es una falacia. No tienen la capacidad ni el peritaje para hacerlo. Además, ellos retienen la evidencia y de esta forma el Negociado no tiene control del transporte y manejo de la misma”, señaló.

Por su parte, Carlos Vélez, presidente de la Local 2099 de SPU en el NCF, destacó que la presión por finalizar pruebas, informes y casos es cada vez mayor, pero ante la falta de personal tanto pericial como administrativo la situación se agrava porque se genera una sobrecarga de trabajo que considera es “inhumana”. 

“La falta de personal es muy grande. Los compañeros están renunciando, el ambiente de trabajo es hostil, no hay remuneración adecuada, violentan nuestros derechos bajo el convenio colectivo. Nunca habíamos experimentado una situación tan caótica como la que estamos viviendo.” expresó.  

González, de su lado, utilizó el ejemplo de una química que cuando les solicitó que compraran un antídoto al narcótico Fentanilo porque si le cae en las manos o lo inhala mientras realiza una prueba en cuestión de 15 minutos podría hasta morir, se molestaron, le indicaron que se compraría si ocurre la emergencia y finalmente fue despedida porque no siguió instrucciones al negarse hacer análisis de la peligrosa sustancia.