Cabo Rojo.- ¿Quién no ha rebuscado en las alcancías, o ese menudito perdido debajo de los muebles y en medio de los asientos del carro para completar los chavitos que hacen falta?

Pues al parecer algo tan cotidiano compensa en los asuntos que le competen al alcalde de Cabo Rojo, Roberto Ramírez Kurtz, en su gestión administrativa.

El ejecutivo municipal caborrojeño se ha dado a la tarea de buscar  aquí y allá, desempolvando  resoluciones viejas de la Legislatura, hasta encontrar números que para bien ha reclamado.

“¿Administrar cuando hay bonanza? Eso es un mamey. Lo hace cualquiera”, dijo el alcalde afiliado al Partido Popular Democrático (PPD). 

“Pero cuando estamos en crisis tenemos que buscar de donde no hay. Yo me di a la tarea de empezar a buscar esos sobrantes de resoluciones desde el 1981, de obras que se hicieron y otras que no se hicieron”, agregó al revelar su nueva técnica para superar la crisis fiscal.

Resulta que buscando entre los archivos, el alcalde identificó que algunas de esas resoluciones habían dejado un sobrante. 

“Algunas tenían $3.27, algunas $0.55 y así las sumamos…”, señaló.

El senador Antonio Fas Alzamora confirmó que con su estrategia Ramírez Kurtz logró identificar fondos que él había asignado “desde el año 2000, cuando yo era portavoz de la minoría antes de ser presidente (del Senado) y existían los famosos barriles de tocino que eliminaron”, recordó, defendiendo la importancia de dichos fondos para asignar dinero para obras a los municipios.

Recientemente, el alcalde recibió una llamada de La Fortaleza solicitándole a la directora de Finanzas Municipal la certificación de ese dinero que estaba en las arcas municipales, gestión que completó el ayuntamiento para poder reclamar $44,000 que totalizan los fondos identificados en esa gestión.

“Esos $44,000 dan para muchas cosas. Tienen un resultado positivo, como el que hemos hecho en el muelle”, dijo el alcalde, haciendo referencia a la reciente inversión de $23,000 para rehabilitar el muelle del sector Combate.

Este dinero en específico estaba destinado al municipio en una resolución del senador Fas Alzamora del año 2000 para mejoras al muelle. 

La actual administración los rescató, y luego de presentar el documento a la Legislatura Municipal, quedó aprobada una resolución, poniendo a disposición del municipio los fondos asignados en alianza colaborativa con la Asociación de Pescadores de Combate Inc., que puso la mano de obra.

“La gente dirá que es poco dinero, pero para los pescadores, después de ver el resultado de lo que tenían y tienen ahora, son $23 mil que se quedaron en nuestra economía”, acotó el alcalde caborrojeño, al destacar que la compra de materiales se hizo en una ferretería local.