El alcalde de San Sebastián, Javier Jiménez, rechazó hoy que el Partido Nuevo Progresista (PNP) establezca una junta para representantes de la comunidad LGBTT.

Recordó que si bien los partidos políticos han contado con organismos que representan algunos sectores, como a los jóvenes y las mujeres, entiende que establecer uno para miembros de la comunidad LBGTT significaría que tener que contar con otros para cada sector de la sociedad.

"Tendrías que tener otros organismos para el sector cristiano, para el sector musulmán, para el sector budista", dijo Jiménez en entrevista con Wapa Radio 680. "Tendrías que tener organismos para pueblos en específico, quizás para Vieques, quizás para Culebra", sostuvo.

"Esa no es la función de los partidos políticos. Cuando los partidos políticos empiezan con estos tipos de segregación o segmentaciones, lo que se convierte es en un partido político que en vez de promover una política pública coordinada general para todo el pueblo, empiezan a promover diferentes tipos de agenda y estoy en contra de que eso sea así", agregó.

Jiménez señaló que respeta el hecho de que personas de la comunidad LGBTT ocupen posiciones en los partidos políticos y el gobierno. Indicó que su oposición a una junta de la comunidad gay en el PNP, responde tanto a su posición de que no sería una fórmula funcional, como a sus creencias religiosas.

"Primero, por las convicciones que tengo. Yo creo que Dios creó hombre y mujer. Si subsiguientemente, el hombre y la mujer escogen algo, yo se lo respeto. Esa es su vida y que haga con su vida lo que quiera, pero que nosotros, como sociedad, promovamos algo diferente a la natural, no estoy a favor bajo ningún concepto", dijo Jiménez.

"Los respeto. Tengo muchos amigos que son de esa comunidad y son personas que han escalado en el gobierno y en las empresas privadas a posiciones sumamente importantes. Hay que respetar lo que ellos entiendan, pero que promuevan socialmente su comportamiento, no estoy a favor de eso", afirmó.

A principios del cuatrienio pasado, el entonces presidente del Partido Popular Democrático, Héctor Ferrer, propuso la creación de una silla dentro de la junta de ese partido para un representante de la comunidad LGBTT, pero no se aprobó.

Dentro del PPD sí existe una organización llamada Populares LGBTT que mantienen una campaña para constituirse como comité independiente ligado a dicha colectividad.