¿Boicot o precaución?

El designado secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas, Miguel Torres Díaz, informó que hasta el sábado más de 250,000 personas habían utilizado el Tren Urbano y las guaguas de la Autoridad Metropolitana de Autobuses (AMA) para llegar a las Fiestas de la Calle San Sebastián, superando cualquier récord de movilización en transporte público en la historia del país.

De esta manera, el funcionario explicó los problemas que se registraron a lo largo del fin de semana con actos de vandalismo la madrugada del sábado y momentos de gran tensión en los terminales de guaguas y lanchas mientras miles de personas esperaban transportación.

Pero relatos recopilados por este diario de personas que fueron testigos de varias situaciones apuntan a que la noche del viernes los choferes de la AMA se quedaron alineados por el lado norte del Capitolio y no abrían las puertas de las guaguas sin explicación alguna desde antes de que bajara un tumulto de gente y se formara un motín. Ese habría sido el detonante del caos que dejó 17 guaguas vandalizadas a un costo estimado de $200,000.

El sábado, presuntamente, los transportistas de otros municipios que daban apoyo tampoco pudieron cubrir la ruta al Viejo San Juan desde antes de las 10:00 p.m., según contaron desde el Parque Central.

Torres Díaz dijo desconocer la información recopilada y aseguró que el presidente de la unión de la AMA, Antonio Díaz, le dijo que la decisión de no atender al público se debió a que estaba en riesgo la seguridad de los choferes.

“Categóricamente no puedo decir eso (que hubo algún boicot). Yo tengo que reconocer que la seguridad está por sobre todas las consideraciones... Se tomó una decisión para proteger a los unionados. Fue una decisión difícil y necesaria. No estoy justificando ni diciendo que fue la mejor alternativa, pero en ese momento el personal de campo entendió que eso era lo mejor”, declaró Torres Díaz en entrevista telefónica.

Maru Quintero, portavoz de prensa de la alcaldesa Carmen Yulín Cruz, también dijo desconocer la situación.

No fue posible una entrevista con el líder sindical.

Se esperaba que con el ajuste en el plan de seguridad la situación fluyera mejor el domingo por la noche. Eso incluyó acortar cinco horas la música en las tarimas oficiales del evento, aumentar la cantidad de oficiales y cambiar los puntos de recogido de pasajeros, entre otros cambios.