El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, convirtió hoy en ley un proyecto que busca conservar durante el proceso de reestructuración de la deuda pública de la isla la estabilidad de las cooperativas financieras depositarias del Banco Gubernamental de Fomento (BGF).

"Mi Administración está comprometida con el movimiento cooperativista de Puerto Rico. Valoramos el esfuerzo de las cooperativas y su aportación en la rehabilitación económica de nuestro país", dijo García Padilla en un comunicado de prensa.

Explicó que la medida enmienda la Ley Orgánica del BGF, brazo financiero del Gobierno, estableciendo que, "de suscitarse un proceso de sindicatura, éste debe atender la seguridad, solvencia y estabilidad de las instituciones depositarias y sus depósitos".

El texto incluye en la prioridad de gastos y reclamaciones no garantizadas en sindicatura las sumas adeudadas por cualquier razón a instituciones depositarias del BGF.

García Padilla prometió igualmente seguir "trabajando en pro de las necesidades particulares de este sector y del bienestar de la población puertorriqueña, tal y como lo muestra el reciente acuerdo advenido con un número significativo de cooperativas que pospone por un año el pago de notas ascendentes a 33 millones de dólares que el BGF debía efectuar".

El domingo pasado el gobernador anunció su decisión de aplicar una moratoria unilateral en el pago de los 422 millones de dólares que debía abonar a los titulares de deuda del BGF.

Aunque en meses pasados ya se había dejado de pagar algún vencimiento puntual de deuda, el anunciado el pasado domingo es el primer impago masivo en la historia de esta isla caribeña.

Igualmente, el gobernador adelantó esta semana que no habrá dinero para pagar los 2,000 millones de dólares en deuda que vencerán el próximo 1 de julio.

Entre ellos, hay unos 700 millones de dólares en obligaciones generales, cuyo pago está garantizado por la Constitución local y que seguramente, dijo Padilla, acarreará "una infinidad de demandas" ante los tribunales estadounidenses.

Ante la complicada situación de Puerto Rico, el secretario del Tesoro de EE.UU., Jacob Lew, viajará a la isla el próximo lunes, con la idea de insistir en la necesidad de que el Congreso estadounidense actúe para que se pueda establecer "un régimen ordenado de reestructuración" de deuda.

"El secretario Lew reiterará su llamado a una acción del Congreso que permita a Puerto Rico acceder a un régimen ordenado de reestructuración y una supervisión independiente que respete el autogobierno", indicó hoy el Tesoro en un comunicado.

Asimismo, durante su estancia en San Juan, Lew subrayará "cómo la crisis de deuda ha dañado ya la salud, seguridad y bienestar de los 3,5 millones de estadounidenses que viven en Puerto Rico".