Por años, se ha hablado del uso eficiente de la energía, pero raras veces se aplica el mismo precepto al agua.

Sin embargo, este lunes la Cámara de Representantes aprobó un proyecto que crearía la “Ley para el Consumo Eficiente de Agua”, que impondría estándares que aplican a nivel federal con el fin de promover un mejor uso de ese líquido.

“Esta Asamblea Legislativa, en pleno cumplimiento de la responsabilidad de velar por el mejor uso de los limitados recursos del Estado Libre Asociado, entiende pertinente y necesario impulsar el consumo eficiente de agua en Puerto Rico”, reza la exposición de motivos de la medida del representante popular Charlie Hernández.

“Aun cuando los logros alcanzados con la implementación de esta ley no se verán a corto plazo, el mayor logro de esta iniciativa será el desarrollo de una conciencia colectiva que forme el camino y preserve los recursos naturales para las futuras generaciones”, agrega.

La medida, aprobada en votación 49-1, busca reglamentar los equipos sanitarios para fomentar la compra y la instalación de aquellos que consuman menos agua. Para ello, adopta los estándares que impulsa la Agencia federal de Protección Ambiental (EPA, en inglés) a través de su programa WaterSense, mediante el cual se certifican los equipos que consumen 20% menos de agua de los parámetros que fijó esa entidad gubernamental en 1992.

Si la pieza se convierte en ley, la Administración de Servicios Generales (ASG) tendrá que desarrollar un reglamento que limite la compra de accesorios de plomería a aquellas piezas que cumplan los requisitos de la certificación del programa WaterSense.

Asimismo, el Departamento de Asuntos del Consumidor y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados tendrían que desarrollar una campaña educativa para promover el uso de los equipos de mayor eficiencia entre las entidades no gubernamentales y la ciudadanía en general.

La Oficina de Gerencia y Presupuesto, la ASG y la Autoridad de Edificios Públicos, entre otras agencias, también tendrían que establecer un protocolo para que todo proyecto nuevo o de remodelación en una instalación gubernamental reemplace, en un término de siete años, todos los accesorios de plomería con equipo que cuente con la certificación federal.

De otra parte, la Cámara le dio paso este lunes de manera unánime a un proyecto que enmendaría la “Ley de Vehículos y Tránsito” (Ley 22-2000) para prohibir que los conductores de vehículos de motor utilicen equipo o dispositivos electrónicos semejantes a unas gafas o espejuelos, o que se coloquen en la cabeza, que tengan la capacidad de proyectar imágenes o información dentro del campo visual. 

La legislación, sin embargo, no provee estadísticas en torno al número de accidentes de tránsito ocasionados por el uso de estos artefactos.

“El hecho de que la imagen no obstruya la visibilidad en su totalidad no significa que la persona tiene la visibilidad necesaria al conducir un vehículo de motor. Es obvio que si una persona utiliza este tipo de artefacto mientras guía va a estar leyendo o poniendo su atención en la imagen e información solicitada”, señala la pieza de la autoría de los representantes populares César Hernández y Roberto Rivera Ruiz de Porras.