Los terrenos donde ubica el antiguo Acueducto de San Juan,  obra de infraestructura que le proporcionó agua potable a los residentes de la Capital por más de un siglo, podrían pasar a manos del Fideicomiso de Conservación de Puerto Rico.

El Senado aprobó ayer un proyecto de ley que permite que el  Fideicomiso adquiera los terrenos donde ubica esa estructura histórica,  en el barrio Venezuela, de Río Piedras, específicamente en los predios del Jardín Botánico de la Universidad de Puerto Rico.

El Acueducto de San Juan se construyó entre finales del siglo XIX y principios del siglo XX, siendo el primer acueducto en suplirle agua potable a los sanjuaneros.

El conjunto arquitectónico se compone de una pequeña represa, de una casa de llaves, una casa de empleados, una casa de máquinas de vapor y seis tanques de decantación y filtración.

Cuenta, además, con un edificio que alberga nueve de los doce filtros mecánicos que se instalados en el lugar  durante la Primera Guerra Mundial.

En 2005, el Fideicomiso de Conservación de Puerto Rico asumió la custodia del Acueducto con el interés de preservar y restaurar sus instalaciones.

La entidad desea convertir el área en un espacio de investigación científica y ecológica, además de utilizar las instalaciones para recreación de la ciudadanía.

La institución tiene un acuerdo de usufructo con la Universidad de Puerto Rico, pero le interesa obtener la titularidad de los terrenos, ante la envergadura del proyecto.

Esas tierras son parte del Corredor Ecológico de San Juan.