Vega Alta. Entre mísero y bajo.

El alcalde de Vega Alta, Isabelo “Chabelo” Molina, aún no encuentra cómo describir su jugoso aumento de salario, pero argumentó que la decisión vino a modo de contrarrestar la “mísera” pensión de $2,700 que recibirá cuando se retire.

Aunque fue rápido en corregir el adjetivo con el que describió la pensión, el alcalde justificó el aumento diciendo que “cuando uno trabaja como alcalde, los gastos son mayores”.

Cuando se le cuestionó sobre el aumento de $6,500 a $8,000, que fue aprobado por la Legislatura Municipal vegalteña el pasado 14 de mayo, el alcalde respondió destacando el buen manejo de las finanzas en las arcas municipales.

“En el caso de Vega Alta, yo llevo 17 años trabajando sin déficit, en los cuales no se le ha reducido nunca el horario a los empleados y tampoco se ha despedido personal. Inclusive, fuimos el único Municipio que dimos aumento de sueldo a todos los empleados el año pasado. No se le debe dinero a ninguna agencia ni contratista y tenemos margen prestatario para completar obras”, sostuvo.

Molina indicó que durante la campaña electoral del 2004 renunció a su salario -para aquel entonces de $5 mil- y que solamente vivió de su pensión de retiro. No obstante, recuperó su sueldo regular, y aprovechó para aumentarlo a $6,500, tras darse cuenta de que la pensión no le daba “para vivir”.

Por otro lado, rechazó la aseveración que hiciera el ex candidato popular a la alcaldía, Javier García Cabán, de que con este aumento se estaría asegurando una pensión más alta gracias a la nueva Ley de Retiro, que calcula la compensación de acuerdo con el salario más alto devengado en los tres años previos a la jubilación.

“Eso no es correcto, porque yo tengo una pensión diferida. Nada de lo yo he trabajado se suma para sacar cuenta de la pensión. Solamente me devuelven los ahorros que yo haya acumulado. La pensión se queda en lo mismo que yo tenía”, alegó.

Con las cosas como están, ¿usted cree que es simpático tomar una decisión como esa?

Siempre habrá un grupo que lo vea antipático. Lo importante no es si es simpático o antipático. Lo importante es ver el salario dentro del contexto de la buena administración del Municipio.

¿Le hace falta ese dinero?

Cuando yo me retire yo voy a vivir con $2,700, y los gastos que se tienen en estos momentos son grandes. Realmente, uno trata en la medida que sea posible de tener un salario razonable; en mi caso, que sea suficiente para poder equiparar la pensión que voy a tener, que va a ser mísera porque...

¿Mísera?

No, mísera, sino baja, comparada con las pensiones de otros alcaldes.

¿El sueldo ni la pensión le dan?

No es que no me den. Es que no es lo mismo trabajar como alcalde que recibir una pensión retirado. Cuando estás retirado no tienes los gastos inherentes a la posición de alcalde y uno se puede ajustar a un nivel de vida distinto. Pero, cuando trabajas como alcalde, los gastos son mayores.

No aprueban el aumento

El aumento de salario no fue visto con buenos ojos por los vegalteños.

“En vez de aumentarse el sueldo, él debió haber hecho algo de beneficio para el pueblo”, opinó Ramón Ortiz González.

Por otro lado, Joselyn Olivo Montañez calificó el acto como un abuso.

“¿Cómo se atreve a aumentarse el sueldo cuando él no ha hecho nada por el pueblo? Ni en la plaza pública tienen zafacones. Los servicios están malos, malos”, dijo. “Ese dinero lo debió usar para ayudar a la gente que lo necesita”.