El Comité de Transición del gobernador electo Alejando García Padilla anticipó este lunes un problema de flujo en la caja del Departamento de Hacienda ante inequidades entre las proyecciones del gobierno saliente de Luis Fortuño y el patrón de recaudos al erario.

En el segundo día de las vistas de transición que se efectúan en el Departamento de Estado en el Viejo San Juan, dos temas dominaron la discusión: los ingresos al fisco y la implementación de la próxima fase de la reforma contributiva, que contempla una reducción escalonada en las tasas de tributación de los individuos y corporaciones.

“El desfase entre las proyecciones y los recaudos va a generar un problema de flujo de caja en algún punto del primer trimestre del 2013”, afirmó Alberto Bacó, integrante del Comité de Transición del gobierno entrante, en una rueda de prensa tras conocer que la caja del Departamento de Hacienda podría terminar el año fiscal con un déficit de $368 millones.

“Se valida nuestra preocupación de que el déficit no es el indicado anteriormente. Es de $1.1 billón ($1,100 millones), que se compone de $333 millones del déficit proyectado y $773 millones de refinanciamiento de deuda”, indicó Bacó.

En la mañana, el secretario de Hacienda, Jesús Méndez Rodríguez, presentó un cuadro de la situación fiscal del país, que incluyó los atribuidos logros con las casas acreditadoras que evalúan el crédito de Puerto Rico.

También ofreció las proyecciones de recaudos, que el equipo de trabajo de García Padilla calificó de muy “ambiciosas” y lejanas de la realidad que pintan los números oficiales.

En el caso específico del Impuesto sobre las Ventas y Usos (IVU), Méndez Rodríguez proyectó para el próximo año un aumento de un 21.4% en los ingresos que genera este gravamen, pese a que los ingresos en este renglón aumentaron de 1.2 % a un 3.1% del 2011 al 2012.

A esto se suma, que los ingresos que entran al fisco por concepto del IVU todavía son menores a los que se reportaron en el 2008.

 En el 2008, el gobierno recibió $1,143,599,000; mientras que en el 2012 ingresó $1,141,647,000, según los datos oficiales de Hacienda.

Actualmente, y según un nuevo modelo de medición de Hacienda, el nivel de captación del IVU se encuentra en el 67.1% de un 63.8% en el 2008.

Caja de Hacienda

En el caso del flujo en la caja de Hacienda, que funciona como una suerte de libreta de cheques, Méndez Rodríguez presentó tres escenarios.

El primer escenario entrante contempla un déficit de $368 millones al final de año fiscal de curso.

Ante este cuadro, el abogado contributivo Juan Acosta, del Comité de Transición de García Padilla, hizo varias preguntas e insistió en la deficiencia que heredaba la nueva administración.

El segundo escenario presentado por Méndez Rodríguez contempla un déficit de $50 millones y se alcanzaba con el atraso del pago a suplidores durante 30 días.

Pero Méndez Rodríguez insistió en el tercer escenario que termina el año fiscal con un sobrante de $267 millones que se logra a costa del atraso en el pago a los suplidores durante 60 días y en los reintegros de los contribuyentes.

Aunque con resultados finales diversos, los tres escenarios incluyen tomar prestado a través del refinanciamiento de la deuda, se indicó.

Precisamente, ese debate entre las proyecciones y el análisis de los números llevó al Comité de Transición entrante a poner en duda la continuación de la reforma fiscal impulsada por Fortuño.

“Lo que luce es que de los propios números que nos da el gobierno saliente distan del deseo del Gobernador de que se implante porque estas proyecciones no dan para que se cumplan con estos tres criterios”, afirmó Bacó.

Insiste en la reforma contributiva

Sin embargo, Méndez Rodríguez y el secretario de la gobernación, Miguel Romero, defendieron las políticas económicas implementadas por esta administración y aseguraron que existen las condiciones para completar la reforma contributiva.

“Requiere que haya un compromiso con la reforma, que se crea en ella. Nosotros implementamos una reforma en un cuatrienio donde el déficit estaba en sobre $3,300 millones. Heredamos un gobierno con una proyección de crecimiento económico de -3.8% y al día de hoy ese déficit está reducido en un 90% y la proyección económica, aunque moderada, está en terreno positivo. Quiere decir que aquí hay unos componentes principales: el control de gastos de parte del gobierno. En ese sentido, lo que queda es una brecha muy pequeña en comparación a lo que nosotros tuvimos que hacer. Así que si hay la voluntad, ahí están las herramientas necesarias para continuar con la reforma contributiva”, afirmó Romero.

También insistió en que existe una “brecha pequeña” para alcanzar los ingresos que permitan la implementación de la reforma contributiva.

“No es lo mismo tener un hueco de $3,300 millones de déficit operacional que $338 millones. Nosotros pudimos implementar la reforma contributiva, pudimos añadir personas a la reforma de salud, desarrollamos el metro urbano e infraestructura como las escuelas del Siglo 21 en ese escenario económico que nosotros tuvimos que enfrentar. Ahora el escenario económico, aunque sin duda alguna como lo dijimos en la campaña Puerto Rico enfrenta grandes retos al igual que el resto del mundo, yo creo que el entorno económico es mucho más favorable para continuar con aquellas políticas económicas que han resultado ser positivas para el pueblo, especialmente para el bolsillo del consumidor”, respondió Romero.

En torno a la proyección para los recaudos del IVU, Méndez insistió en que se puede lograr con esfuerzos dirigidos a recuperar $74 millones que existen en este momento en las cuentas por cobrar de Hacienda.

“Vas a tener grandes brincos en la captación siempre y cuando le dediques los recursos”, insistió Méndez Rodríguez.

En respuesta a los planteamientos de Romero sobre la viabilidad de la reforma contributiva, Bacó se reiteró en la dificultad para implementar la reforma contributiva y ante una pregunta sobre el compromiso del gobierno entrante con dicha política económica afirmó que “en esta etapa no estamos formulando (política pública). No somos funcionarios electos. El gobernador tomará sus decisiones, pero la directriz es que en este momento no hay ningún aumento en las contribuciones”.

El rechazo al aumento en las contribuciones surgió porque, en varias ocasiones, miembros del Comité de Transición saliente presentaron esta alternativa ante la aparente resistencia que mostraban los miembros del Comité de Transición entrante a las políticas económicas de la actual administración.

Acosta insistió en que la rebaja en las tasas de contribución que propone la reforma se activa se forma automática cuando se cumpla con unos requisitos específicos, según la legislación.

Explicó que estos criterios de cumplimiento son que los recaudos alcancen la cifra $9,250 millones, que esos ingresos excedan por un 1% la partida de los gastos y que el índice económicos de crecimiento alcance un 1.5%.

Con el cuadro económico y estos criterios, Acosta reiteró las dificultades que enfrenta la implantación de la reforma.

Alternativas al problema

Ante el problema de flujo en la caja de Hacienda, Bacó planteó que a corto plazo se adoptan medidas como el financiamiento de la deuda y la reducción de gastos, pero que a largo plazo se tienen que mirar otras oportundiades para aumentar los recaudos.

Mencionó que es imperativo mejorar la captación del IVU a través de nuevas tecnologías y que hay que formentar el empleo para agrandar la base de contribuyentos en el país.

Las vistas recesan el martes y siguen el miércoles, cuando comparecerán el Departamento del Trabajo, la Administración de Rehabilitación Vocacional, la Oficina de Recursos Humanos del ELA y la Administración de Desarrollo Laboral.