La prueba contra Elba I. Bonilla Bayón, acusada de apropiarse $1.4 millones de fondos federales que supuestamente gastó jugando en un casino, es voluminosa y complicada, por lo que las partes solicitaron tiempo para examinarla.

En una conferencia de estatus ante el juez federal José A. Fusté, el abogado de la expresidenta del programa Avance de Puerto Rico, Manuel San Juan, informó que ha recibido 55,000 documentos como parte del descubrimiento de prueba.

El abogado indicó que necesita contratar a un contable forense para poder evaluar todas las facturas, y que hoy mismo se reunirá con uno. Dijo que entiende que algunas entradas eran préstamos para su clienta y que ella pagó, pero que necesita tiempo y un perito para corroborar.

El fiscal Pedro Casablanca estuvo de acuerdo en que es un caso complicado y con mucha prueba, que envuelve lavado de dinero y otros delitos.

El juez pautó otra conferencia de estatus para el 4 de agosto.

Bonilla Bayón fue arrestada el 8 de mayo al ser acusada por 175 cargos por apropiarse de propiedad del gobierno federal, encubrimiento de activos de quiebra, fraude a programas de asistencia a estudiantes y de nutrición, lavado de dinero y robo de identidad agravado.

Se alega que se apropió de $1,429,873 entre 2010 y diciembre de 2012, de un total de fondos federales recibidos que ascendieron a $30,800,178.45.

 La acusada, según se imputa, usó su posición dentro de la organización sin fines de lucro para apropiarse de fondos de los programas Head Start y Early Head Start, Child Care Development Fund Program, Child and Adult Care Food Program y del American Recovery and Reinvestment Act, además de las becas Pell.

El Programa Avance operaba y administraba 49 centros Head Start y Early Head Start en los municipios de Loíza, Río Grande, Luquillo y Canóvanas. Ofrecía servicios a 1,318 niños y empleaba a 300 personas. Una vez comenzó la pesquisa entre 2012 y 2013, el Departamento de la Familia estatal le quitó el contrato.

Según la acusación, la implicada, de 67 años, supuestamente emitió 105 cheques en el San Juan Marriott Resort & Stellaris Casino por las cantidades entre $1,000 y $37,000 de aproximadamente 35 cuentas bancarias personales que abrió en los bancos Westernbank, Banco Popular de Puerto Rico, Banco Santander y Cooperativa de Ahorro y Crédito Metodistas Unidos de Puerto Rico. La línea de crédito de $30,000 fue abierta el 25 de septiembre de 2010.

 En total, se alega que gastó más de $800,000 en el casino.

Los fondos eran provenientes de los departamentos federales de Salud y Servicios Humanos, Educación y de Agricultura, por lo que la investigación estuvo a cargo de las oficinas de los inspectores generales de dichos departamentos, en conjunto con el Negociado Federal de Investigaciones (FBI).

De ser encontrada culpable, Bonilla Bayón podría enfrentar hasta 10 años de cárcel por cada cargo, más dos años por el robo de identidad agravado consecutivos a la pena que se imponga, además de reponer el dinero y una multa de $250,000.