Las interrupciones constantes del servicio eléctrico constituyen un “verdadero dolor de cabeza” para el presidente de la compañía Aerostar Airport Holdings, Agustín Arellano quien administra las operaciones del aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín de Isla Verde.

Sus expresiones surgieron en medio de una conferencia de prensa justo cuando colapsó el sistema eléctrico en la zona norte del país que fue convocada para anunciar el éxito de sus operaciones tras cinco años de iniciar su administración la cual ha requerido una inversión de $170 millones en mejoras permanentes, $50 millones en mantenimiento mayor y rehabilitación.

“El aeropuerto cada vez que tenemos un fallo de energía eléctrica es soportado por la operación de 21 generadores de energía, pero básicamente cada día tenemos una serie de interrupciones que son por horas, por minutos etcétera, pero que lamentablemente causan daños o a los generadores, o a los equipos de aire acondicionado o a cualquier otro equipo electrónico que está sujeto a variaciones por cortes de voltaje”, expresó Arellano, quien reconoció que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) les dio la prioridad para la recuperación rápida después del fenómeno atmosférico.

Relacionadas

Los generadores, que tienen un consumo diario de 8 mil galones de combustible diesel, tardaron durante el día de hoy diez minutos en reanudar el servicio de energía eléctrica en el aeropuerto.

“El escenario lo tenemos controlado, no hay elementos de confort, pero todo lo demás opera normalmente, opera el sistema de documentación, el sistema de manejo de equipaje automatizados, operan los ‘gates’ los abordadores, los pasillos, operan todas las luces de las pistas, opera la torre de control, todo eso está operando sin ningún problema, los únicos dos elementos que no tenemos es el confort, que es el aire acondicionado y la energía para las concesiones, como el ‘duty free’ y como algunas concesiones de restaurantes”, observó Arellano.

También reiteró que el aeropuerto cuenta con sus propios tanques de diésel los cuales están llenos permanentemente.

“Si esta contingencia se prolongara tenemos 72 horas de operación continua antes de rellenar de diésel los tanques. Tenemos también agua porque no solo es diésel, también hay que tener agua, las cisternas para que ustedes sepan tenemos medio millón de galones de agua en cisternas listos para ser utilizados en el aeropuerto”, señaló el funcionario.

Agregó que han iniciado un proyecto de cogeneración de energía utilizando nueva tecnología y se disponen a comprar plantas generadoras de emergencia para aires acondicionados porque es un elemento vital en la isla ya que por seguridad no se tienen ventanales.

“Cogeneración es básicamente con gas natural y lo que hace es que reciclas el agua caliente y fría del aire acondicionado para producir energía y con eso se genera para alimentar ciertos circuitos, particularmente del aire acondicionado estamos tratando de hacerlo”, puntualizó.

A su vez, favoreció la privatización de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y de otros servicios gubernamentales.

De otra parte, informó que el estimado de $86 millones que fueron reclamados a la aseguradora tras el paso del huracán, recibieron una semana después del paso del huracán unos $4 millones para gastos de mitigación y actualmente se le entregaron $10 millones adicionales. La reparación más costosa será la de los techos que tienen un costo estimado de $30 millones.

El flujo de pasajeros se mantuvo un 30% menos de como lleva ocurriendo desde el paso del huracán, sin embargo, Arellano aseguró que esperan crecer para el mes de diciembre un 4 por ciento.