La presidenta de la Cámara, Jenniffer González, recibió al mediodía de hoy, jueves, en su oficina del Capitolio a quien la sustituirá en su silla presidencial, Jaime Perelló, en el primero de varios encuentros para realizar una transferencia de poderes sin imprevistos.

No hubo abrazos. Un estirón de mano y varias sonrisas dieron pie al primer encuentro de varios que realizarán para sellar el proceso de transición de cara a un nuevo cuatrienio.

En esencia, González y Perelló buscaban sentar un diálogo para trabajar por adelantar una agenda de país, dijeron en su encuentro con los periodistas.

 “Por mi parte y por la unidad del PNP, vamos a estar trabajando para adelantar todas las causas en que estamos de acuerdo. En aquellas que no, (vamos a) colaborar con la fiscalización o ver cómo se pueden trabajar”, fueron las primeras palabras de la próxima portavoz de la minoría estadista en la Cámara.

Perelló coincidió en que la unidad debe reinar para poder presentar soluciones a los problemas del país.

 “Que el país entienda que la campaña ya pasó, que aquí hay unos hombres y mujeres electos con voto, con una agenda de servicio al país. Hay un cambio de mayoría legislativa y nosotros queremos adelantar una agenda que nos une, hay unos asunto que vamos a diferir, verdad, porque esto es un cuerpo político. Pero aquellos asuntos que no estemos de acuerdo, lo dialogamos para llevar un debate de altura, como el país lo espera”, sentenció el próximo presidente cameral.

Durante el encuentro, fueron pocos los detalles que se informaron sobre el proceso de transición. González indicó que nombró al licenciado Oriol Campos como presidente del organismo, mientras Perelló dijo que próximamente haría el anuncio.

“Entrego la Cámara con un superávit, con una buena administración fiscal”, precisó la saliente presidenta.

 El encuentro entre los representantes culminó con un almuerzo. Panecillos y una ensalada de arugula  era lo primero que les esperaba servido.