El Hospital Municipal de San Juan "salió de coma", gracias a una asignación de $750,000 para la compra de material médico quirúrgico, afirmó hoy, lunes, el doctor Ernesto Torres, director ejecutivo de la Administración de Servicios Médicos (ASEM).

El galeno reveló que el Departamento de Salud identificó la citada partida que será asignada a la ASEM, que se encargará de comprar a las farmaceúticas los productos que se necesitan urgentemente en el citado hospital.

"El Hospital Municipal salió de coma", insistió Torres al precisar que el secretario de Salud, Lorenzo González, encabezó una reunión para encaminar los fondos, que según estimó servirán para atender necesidades a corto plazo, gracias a un acuerdo firmado hoy.

Se refirió a que esa institución municipal estimó que semanalmente se tiene un gasto de unos $125,000 en gastos médico quirúrgicos, que incluyen productos indispensables para operar la sala de operaciones. El cálculo supone que el hospital tendría fondos para esos fines al menos por seis semanas.

Torres dijo en conferencia de prensa que se reunió temprano con el doctor Raúl Reyes y con la representante legal del Hospital Municipal para formalizar el acuerdo que busca canalizar rápido pedidos de material médico quirúrgico.

La insuficiencia de medicamentos y paralización parcial de operaciones en el Hospital Municipal trascendió públicamente con detalles después que el alcalde Jorge Santini perdió las elecciones.

Mientras, la alcaldesa electa, Carmen Yulín Cruz, aunque inicia formalmente sus funciones durante la segunda semana de enero, encabezó reuniones para ver cómo allegar fondos rápidos a la institución.

Según Torres, la asignación en cuestión es importante porque, además de garantizar servicios médicos, sirve para proteger las residencias de varios médicos que hacen sus prácticas en esa instalación médica.

Por otro lado, Torres dijo no tener información final sobre el resultado de la evaluación de un grupo de expertos sobre posibles cambios en el protocolo aplicable a pacientes con muerte cerebral.

La revisión se inició a raíz de la polémica pública asociada a cuestionamientos del tiempo máximo que debe mantenerse conectado a un ventilador un paciente con muerte cerebral. El debate se intensificó tras el deceso del exboxeador Héctor "Macho" Camacho.

El doctor Torres insistió en que su posición como médico es conceder la máxima discreción a familiares del paciente con muerte cerebral para que consulten sobre la posible donación de órganos.

De acuerdo con Torres, es tras el diagnóstico de muerte cerebral que los familiares inmediatos del paciente determinan si se van a donar órganos y por eso no se puede desconectar el ventilador de forma inmediata.

Un grupo de médicos considera cambios en el protocolo o normas de lo que se va a hacer en estos casos en el futuro y no se descartan enmiendas a la Ley de Donaciones de Órganos y Tejidos.

"La ley tiene áreas no muy definidas, no claras", sostuvo Torres, quien insistio en que se trata de una decisión familiar en la que personalmente procura "dar el espacio" a los padres de un paciente para llegar a acuerdos con Life Link, la compañía que en la Isla tramita la obtención de órganos para transplantes.

Si la decisión de los familiares es no donar órganos, se desconecta del ventilador el paciente tan pronto se notifica esa determinación, pero de lo contrario hay que mantener a la persona con muerte cerebral bajo respiración artifical para evitar el daño de los órganos que serán donados, explicó Torres.

Insistió en que el caso de un niño de Arecibo, cuyos padres acudieron a los tribunales para evitar su desconexión del ventilador, fue un caso "extremadamente especial", pero admitió que lo que se procura con la revisión del protocolo es evitar que familares tengan que acudir a tribunales para situaciones similares.