A pesar del discurso de austeridad con el que en el 2009 inició su gestión administrativa el gobernador Luis Fortuño y de existir una directriz expresa y clara que obligaba a la cautela financiera en la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), una de las dependencias que está bajo la sombrilla del Departamento de Transportación y Obras Públicas, solo la nómina de empleados de confianza del secretario del DTOP, Rubén Hernández Gregorat, asciende a la astronómica suma de $3.9 millones anuales.

La extensa lista de ayudantes, asistentes, administradores y directores totaliza 59 puestos, entre los cuales hay 27 mujeres y 32 hombres.

El grupo que compone la mano derecha del secretario tiene salarios que fluctúan entre los $3,000 y los $8,333 mensuales. Los salarios de los 16 ayudantes especiales del titular van desde los $41,700 a los $95,700 anuales. Pero, no solo este nutrido grupo de personas cercanas al secretario ha disfrutado de jugosos salarios durante el cuatrienio, sino que algunos de ellos contaron con un empujoncito adicional.

Fuentes gerenciales de la agencia aseguran que ha habido numerosas gestiones “muy proactivas” para ubicar en puestos de carrera a algunos de los nombres de la extensa lista. Sin embargo, la ayudita que se le ha prestado a uno de los integrantes del séquito ha ido un poco más lejos. Ese es el caso de Alfredo Santiago Irizarry, el candidato novoprogresista a la alcaldía de Juana Díaz, que fue atornillado en un puesto de carrera, creado a su medida, para dirigir una nueva oficina en la ACT, a tan solo unas pocas semanas antes de la veda electoral y a pesar de que en su contra había múltiples quejas y de que enfrenta al menos una demanda en la esfera federal por discrimen político.

Una plaza sastre

Santiago Irizarry fue nombrado directamente por Hernández Gregorat en un cargo que aún no existe en ningún organigrama del DTOP e igual ocurre con la nueva oficina que se supone que esté bajo su supervisión. En su nuevo puesto, el candidato penepé podría devengar hasta $7,110 mensuales, mientras que antes su sueldo era de $5,317.

Entre sus tareas como flamante gerente, el aspirante debe trabajar en la Estación de Pesaje y Medidas en Salinas y supervisar empleados que revisan los camiones para que estos, a su vez, cumplan con los estándares federales para manejo en las autopistas.

“Para todos los efectos, esto fue algo creado para él, para poder colocarlo en un puesto de carrera y que no tiene justificación porque no era necesario. Ya todas las funciones y programas federales para el pesaje de los camiones se hacían sin tener que crear ese puesto ficticio”, dijo a este diario una fuente con conocimiento del funcionamiento interno de la agencia.

“Peor aún. En los últimos días llega a la estación, poncha y se va. Luego regresa como a las 5:00 (de la tarde) para ponchar. El trabajo se hace igual por las mismas personas que antes que él llegara”, agregó la fuente.

Esto ha levantado serias sospechas no solo por la falta de desempeño de funciones reales, sino porque el efecto del nombramiento ha sido asegurarle un salario a una persona que en los últimos meses ha dedicado gran parte de su tiempo a hacer campaña. “No solo no hace nada en la agencia y ni se le ve, en la calle sí lo ven haciendo campaña”, aseguró otra fuente de la agencia.

El puesto, incluso, podría rayar en la ilegalidad, ya que el gobernador declaró estado de emergencia fiscal y todas las agencias debían adoptarlo, según confirmó a este diario el propio Hernández Gregorat. El efecto de esa declaración era paralizar la creación de plazas permanentes y, al día de hoy, sigue vigente.

Un dato adicional que ensombrece aún más la forma en la que se creó el puesto para Santiago Irizarry y que hace sospechar sobre la necesidad que verdaderamente había del cargo es precisamente que primero se le oficializó la plaza permanente al candidato, y dos meses y medio después fue que se creó la oficina que el aspirante dirigiría.

Hasta julio de este año, Santiago Irizarry fungía como ayudante especial del secretario del DTOP, que es un puesto de confianza. Luego lo nombraron gerente general, que seguía siendo de confianza.

Pero entonces gana la primaria penepé para la alcaldía en el municipio de Juana Díaz y, dos meses después, específicamente el 30 de mayo de 2012, llega su nombramiento a un puesto de carrera. La oficina que ahora está a su cargo se anunció el 8 de agosto de 2012 mediante el boletín informativo 2013-001, otros dos meses más tarde.