En el tiempo en que se supone estuviese bajo el sol en trabajos de construcción y de ornato, un empleado del Municipio de San Germán, con la ausencia de sus superiores, estaba sin ningún tipo de supervisión bajo el techo y fresquito de su casa editando vídeos que después se usarían para proyectar la obra de la administración municipal y su alcalde, Isidro Negrón Irizarry, reflejó una auditoría de la Oficina del Contralor de Puerto Rico (OCPR).

Según el informe de auditoría que difundió hoy la OCPR, en julio de 2005 la Administración Municipal le ofreció un puesto de Trabajador con carácter transitorio a un empleado que desde enero ocupaba un puesto irregular de Artista Gráfico. El puesto de Trabajador que tenía al menos hasta el 31 de diciembre de 2011, periodo hasta donde cubrió la auditoría, le asignaba labores de construcción, ornato y mantenimiento de obras públicas.

No obstante, el empleado- a quien el informe no identifica por su nombre- no había cogido, ni una pala, ni una máquina de cortar grama como tampoco mapo o escoba. El trabajador municipal siguió en labores similares que tenía como empleado irregular. Es más, sus tareas estaban relacionadas con funciones de un editor de noticias de televisión.

“Estas (sus tareas) las realizaba desde su residencia privada en Mayagüez, y consistían en editar grabaciones tomadas por otros empleados municipales para preparar y organizar dos programas de televisión sobre las diferentes actividades y obras realizadas por el Municipio. Dichos programas eran transmitidos en dos canales locales del área oeste”, menciona el informe de auditoría.

Aunque como empleado de obras públicas hacia funciones de comunicaciones, al alcalde no le pareció ninguna irregularidad mantener ese subterfugio porque en la misma explicación que ofreció el alcalde a la OCPR reconoce que a ese empleado se le contrató en un puesto a sabiendas que ejercería otras funciones. Este ardid es contrario a las normas de personal y al Plan de Clasificación y Retribución del Municipio.

“El empleado referido fue contratado como trabajador, ya que en el plan de clasificación vigente no existe un puesto que describa específicamente las funciones realizadas por éste”, admitió Negrón Irizarry como justificación en una comunicación enviada a la OCPR. “Por instrucciones de su supervisor, el empleado realizaba trabajos fuera de la oficina, cubriendo actividades oficiales en ocasiones fuera del horario regular de trabajo. Los empleados asignados la oficina de Comunicaciones y Prensa tienen horarios de trabajo de acuerdo a la necesidad de servicio”.

Sin embargo, las declaraciones que hicieron tanto el empleado como su supervisor a los auditores de la Contraloría, apuntan a que trabajaba desde su casa en Mayagüez. El informe señala que los vídeos a editar se los proporciona otro empleado que hacia el trabajo de grabación.

“El empleado le declaró a nuestros auditores que el alcalde lo autorizó, de forma verbal, a trabajar desde su residencia. En el Municipio no existe ninguna ordenanza ni resolución de la Legislatura Municipal que autorice a algún empleado o funcionario a trabajar desde su residencia”, señala el informe suscrito por la contralora, Yasmín Valdivieso.

Según el informe de la OCPR  “el supervisor inmediato le indicó a nuestros auditores que el empleado trabajaba desde su residencia, debido a que contaba con un estudio y un equipo de edición. Sin embargo, el empleado le certificó a nuestros auditores que el equipo que utilizaba era uno básico que consistía en una computadora valorada en $1,800 aproximadamente”.

El empleado esporádicamente llenaba hojas de asistencia cuando comparecía a la Oficina de Artes Gráfica o algún funcionario le llevaba el documento para que lo firmara.

“No existía ningún tipo de control mediante el cual el supervisor inmediato de dicho empleado pudiera corroborar el trabajo realizado por este ni que estuviera cumpliendo con su jornada de trabajo de siete horas diarias, cinco días a la semana”, reveló la auditoría que cubrió el periodo de 1 de enero de 2010 al 31 de diciembre de 2011.

Asimismo, tampoco en sus licencias se le descontaron 29 horas laborales que utilizó para realizar gestiones personales entre de enero de 2009 a octubre de 2011. 

El Informe no aclara si el empleado ocupa el puesto en propiedad después de un periodo probatorio que según la reglamentación de personal y las disposiciones de mérito tienen que cumplirse en el puesto contratado.

La auditoría reflejó además deficiencias en contratación de obras, transferencias de crédito entre partidas presupuestarias sin las certificaciones de sobrantes requeridas, cesión gratuita del uso de propiedad y de equipo municipal sin la autorización de la Legislatura Municipal y sin el otorgamiento de contratos escritos y otorgamiento de donativos a una entidad que no estaba legalmente constituida. 

Así también entre los hallazgos de auditoría se encuentran la falta de investigaciones relacionadas con accidentes con vehículos municipales y hurto de propiedad, falta de fiscalización por parte de la Comisión de Asuntos de Auditoría e Informes del Contralor de la Legislatura Municipal y falta de controles relacionados con los almacenes y deficiencias relacionadas con los archivos de documentos públicos del Municipio.