Al 30 de junio de 2015, agencias gubernamentales adeudaban $55.9 millones a la Universidad de Puerto Rico (UPR), según documentos suministrados hoy, lunes, por la institución educativa a la Comisión Conjunta sobre Informes del Contralor de la Cámara de Representantes.

Hasta mediados del año pasado, la UPR también registraba “deudas incobrables” por otros $3.9 millones. En ese renglón muchas de las partidas pendientes de pago corresponden a dependencias del gobierno, de acuerdo con los documentos sometidos al organismo legislativo.

Durante una vista legislativa presidida por el representante César Hernández Alfonzo, también se habló sobre el gasto de $80 millones que hizo la UPR para implantar un sistema de información unitario que no funcionó y para el cual se contrató a la empresa Oracle. 

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En la audiencia se consignó que las millonarias deudas, así como el fallido sistema de información, fueron objetos de señalamientos en auditorías de la Oficina del Contralor.

Según los documentos entregados por la UPR a la comisión cameral, la agencia del gobierno que más adeudaba dinero hasta junio pasado es la Administración de Servicios Médicos de Puerto Rico (ASEM) cuya deuda certificada era de $38,338,448. Mientras, la segunda deuda más significativa la tiene la Compañía de Turismo, con $5,513,223.

Sobre la deuda clasificada como “incobrable”, el mayor deudor es la Oficina del Gobernador, con unos $654,700, según el análisis fiscal hecho por el Centro de Investigación y Desarrollo del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM).

Los documentos suministrados por la UPR indican, además, que otras de las deudas clasificadas “incobrables” incluyen $558,589, adeudados por a la Administración de Asuntos Energéticos, así como $462,027 pendiente de pago por parte del Departamento de Transportación y Obras Públicas) y $333,500 adeudados por la Agencia federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés).

El director de Finanzas de la UPR, Noberto González, declaró durante la vista pública que el monto de deuda sin cobrar es mayor, si se incluye una partida de $5 millones que le deben los empleados del sistema a la institución por concepto de dinero pagado por error o de forma injustificada.

Por otro lado, planteó que el gobierno federal emite pagos sin precisión en las partidas a las que se aporta, por lo que lo ubican en una cuenta remanente, pendiente de ser distribuido. Esa situación, según expuso, crea una especie de deuda ficticia. “Se sabe la cantidad que se cobró, pero no se sabe dónde aplicarlo”, argumentó.

Al respecto, el representante Hernández Alfonzo cuestionó si el gobierno federal no ha hecho ningún señalamiento negativo por esta situación y González respondió en la negativa.

“Esto es un asunto que se debe atender", ripostó el legislador.

Cambios en la nómina

Por otro lado, legisladores cuestionaron qué se ha hecho para establecer un sistema de información interconectado con Recursos Humanos, Presupuesto y Asuntos Estudiantiles.

El doctor Jose Lasalde, vicepresidente de Investigaciones, estimó que para el 15 de julio saldrá la primera nómina que tendrá bajo un mismo sistema a Recursos Humanos y Presupuesto.

Adelantó que en dos años se espera tener todos los sistemas de los 11 recintos bajo un mismo sistema de datos y se mostró confiado de que ese modelo pueda ser “rentado” a otras instituciones universitarias del país.

La explicación surgió como seguimiento al señalamiento realizado por el Contralor en torno a que la UPR pagó en la década de los años 2000 unos $80 millones por el fallido sistema contratado con Oracle.

Víctor Díaz, a cargo de la implantación de los sistemas de información, dijo que con el modelo no funcional que estableció Oracle se desarrolló un nuevo sistema de información estudiantil. El mismo fue creado por alumnos y profesores del RUM, destacó al resumir un saldo positivo de una experiencia negativa.

Mientras, Lasalde explicó que fue en el 2011 que, como presidente interino de la UPR, decidió detener los contratos con Oracle. Explicó que la decisión la tomó porque la empresa requería otro contrato de $46 millones.

Indicó que esa fue la mejor decisión que pudo tomar, ya que con solo $3.1 millones adicionales los profesionales del RUM pudieron desarrollar el nuevo sistema.

“El caso de Oracle fue catastrófico para muchas instituciones, no solo para la UPR”, señaló Lasalde, al comentar que la Universidad de Stanford está inmersa en un proceso legal contra la citada empresa.

De inmediato, el representante Hernández Alfonzo preguntó si la UPR ha considerado también una acción legal contra Oracle, pero el director de Finanzas respondió que no.

“Haremos un análisis para ver si la Universidad tiene los argumentos para hacer una reclamación legal, como ha hecho Stanford”, respondió González ante el planteamiento del legislador.