El gobernador Alejandro García Padilla anunció este viernes que firmó una orden ejecutiva para prohibir el uso de bolsas plásticas en Puerto Rico a partir del 1 de julio de 2016.

"Es para garantizar que a partir del año próximo no haya bolsas plásticas", expuso durante una visita al Caño Martín Peña, en San Juan. 

Específicamente, la orden ejecutiva establece que “por ser política pública de esta administración la conservación de nuestros recursos naturales, se ordena a la Administración de Desperdicios Sólidos (ADS) que, a partir del primero de julio de 2016, prohíba la dispensación de bolsas plásticas por parte de los comercios a través de un programa de reducción de desperdicios sólidos conforme a las facultades que le otorga la Ley 70-1992 (Ley para la Reducción y el Reciclaje de Desperdicios Sólidos)”.

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Además le ordenó a la mencionada agencia que, en lo que entra en vigor su directriz, realice una campaña de educación para los consumidores y comerciantes. Además, deberá preparar un reglamento que incluya las multas a las que se exponen por violentar su orden. 

El anuncio sobre la firma de esta orden ejecutiva la hizo el ejecutivo durante una actividad en la que se dieron a conocer los detalles del acuerdo alcanzado entre el gobierno de Puerto Rico, el municipio de San Juan y agencias federales para restaurar el Caño Martín Peña. 

Por otro lado, el ejecutivo urgió a la Legislatura a convertir en ley el proyecto de la autoría del representante José Báez, con el que se pretende regular el uso de las bolsas plásticas en la Isla. La medida no logró el pasado lunes los votos en la Cámara de Representantes. 

"Esto tiene que hacerse por ley para que no vuelva un cambio de visión de nuevo hacia la derecha y se vuelva a permitir", dijo García Padilla al urgir a los legisladores, incluidos los 25 representantes que le votaron en contra al proyecto, a respaldar la propuesta. 

Durante su alocución, García Padilla explicó que las bolsas plásticas tardan alrededor de 500 años en descomponerse. 

Según sus estimados, cada cadena de supermercados importa anualmente toneladas de bolsas plásticas. "Todo eso para en los vertederos en los casos menos malos", apuntó, para añadir que también ensucian cuerpos de agua y afectan el desarrollo y supervivencia de otros seres vivos.