El gobierno de Puerto Rico abrirá una oficina de la Administración de Asuntos Federales en la Florida central, desde donde atenderán las necesidades de los boricuas en todo el estado.

Las nuevas instalaciones están ubicadas en la ciudad de Kissimmee, en el Condado Osceola, donde el 58 por ciento de la población es hispana, la gran mayoría puertorriqueña.

El principal objetivo de esta oficina será ayudar al desarrollo económico de los puertorriqueños y servir de facilitador entre estos y las municipalidades locales. También se encargará de que los puertorriqueños tengan una participación más activa en las elecciones locales.

La oficina será inaugurada oficialmente el próximo 23 de agosto, en un acto que contará con la presencia del gobernador de la isla, Alejandro García Padilla, así como de funcionarios de la municipalidad local, dijo a Efe Betsy Francischine, recién nombrada directora de la nueva agencia gubernamental.

"Kissimmee es el lugar ideal, aquí reside una gran mayoría de la diáspora puertorriqueña, es también un lugar que carece de organizaciones de servicios, como es el caso de Orlando, por ejemplo, donde cuentan con asociaciones de gran ayuda para nuestra comunidad", dijo Francischine, ex directora para asuntos hispanos del Partido Demócrata en Orlando y de asuntos hispanos de la oficina del congresista federal Alan Grayson.

De acuerdo con Francischine, la oficina de PRFAA (en inglés) en Kissimmee servirá de enlace para la tramitación de documentos, como actas de nacimientos, y de otros asuntos oficiales con la isla. "También contaremos con un servicio de referido hacia otras agencias y servicios que pudiesen necesitar en las áreas de vivienda, escuelas, trabajo, y esas cosas", dijo.

Asimismo, servirá de enlace para el desarrollo económico e intercambio de negocios con empresarios entre la isla y la península, agregó la funcionaria boricua.

La PRFAA en Kissimmee será la única oficina del gobierno de Puerto Rico en la Florida, y la tercera en los Estados Unidos, por lo que, según Francischine, la misma viene a llenar un vacío en la comunidad puertorriqueña.

Esta comunidad "necesitaba contar no sólo con una representación oficial de su gobierno aquí, también con una agencia con la que puedan identificarse y encontrar soluciones a sus problemas".

"Hemos visto que muchos negociantes puertorriqueños se instalan aquí con la intención de prosperar y luego de uno o dos años, tiene que cerrar, ya sea porque no hicieron los trámites adecuados, o no solicitaron las licencias y permisos necesarios para operar en este Estado", dijo Francischine.

Unos 600 mil puertorriqueños residen en la Florida, casi la mitad de estos repartidos en las principales ciudades de la Florida Central, como Orlando, Kissimmee, Clermont y Sanford.

Cada mes unos mil puertorriqueños llegan a residir a la Florida Central, tanto desde la isla, como desde otros Estados del norte, según cifras manejadas por la funcionaria de la PRFAA.

 "Eso significa que nuestra región es ya la más importante para la diáspora puertorriqueña, incluso más importante que Nueva York", concluyó Francischine.

No es la primera vez que el gobierno de Puerto Rico cuenta con una oficina en Florida. La primera fue abierta en Orlando en 1995 por el entonces gobernador Pedro Roselló.

En el 2009 la oficina sucumbió bajo la gobernación de Luis Fortuño, quien el año pasado dijo en Orlando que no existían posibilidades de su reapertura debido a la falta de fondos.