El Gobierno de Puerto Rico suspendió el pago de las licencias por días de enfermedad acumuladas este año por los empleados públicos de varias dependencias públicas.

La liquidación se debía hacer en marzo. Pero, según explicó esta tarde la secretaria de la gobernación Ingrid Vila, el Gobierno no puede hacer los pagos debido a que existe un déficit de $20 millones en la caja. La liquidación de enfermedad el año pasado ascendió a $91 millones.

"Esto hace insostenible lograr efectuar los pagos por licencia de enfermedad este mes", sostuvo Vila. "La orden ejecutiva viene a asegurar que se paguen las nóminas, entiéndase las nóminas de todos los empleados públicos".

"Estos pagos de licencia acumuladas no fueron incluidas en el presupuesto del año fiscal por la pasada administración", agregó la funcionaria de La Fortaleza.

En conferencia de prensa en La Fortaleza, Vila dijo que se están tomando los pasos para estudiar la manera en que puedan hacer esos pagos o parte de ellos, antes del 30 de junio, y cómo se manejaría el restante acumulado que no se salde.

La Orden Ejecutiva le instruyó al Departamento de Hacienda y a la Oficina de Gerencia de Presupuesto (OGP) hacer un estudio agencia por agencia para buscar medidas para aminorar el impacto presupuestario en las liquidaciones. El plan debe ser entregado al gobernador dentro de 45 días.

Señaló que deberán "identificar medidas de mitigación, tanto de ingresos y gastos, como de manejo de efectivo, que puedan viabilizar la liquidación de las licencias de enfermedad antes del 30 de junio de manera ordenada". Además, se tomará en consideración la situación fiscal de cada agencia y el origen de sus fondos.

"Estamos confiados en que en este esfuerzo se logren identificar las medidas y alternativas que posibiliten el pago de estas licencias antes del 30 de junio", mantuvo.

Por su parte, el director de OGP, Carlos Rivas, dijo que después de los ingresos que se registren en Hacienda en abril, cuando expira el periodo de radicación de planillas, se podrá tener un panorama más claro del grado de cumplimiento con el saldo de licencias por enfermedad.

"Lo que estamos diciendo ahora es que en marzo, con los $90 millones adicionales y los $20 millones, esos cheques no tendrían fondos", indicó Rivas. "Ahora, con un manejo efectivo de caja, se puede contemplar, en la medida que sea posible, dentro del presupuesto del gobierno, ir liquidando algunas de esas licencias a través del año fiscal, o quizás llevándolas a un disfrute de vacaciones".

Rivas indicó que al entrar la actual administración al gobierno, el déficit de la caja para el 30 de junio - cuando el gobierno tiene que cumplir con el pago de una serie de deudas - habia sido proyectado en $600 millones. Destacó que se han adoptado varias medidas, pero que todavía anticipan que estará entre los $200 y $250 millones.

"Quizás se pueda hacer (el pago) de forma escalonada", añadió Rivas, quien considera que "son reales" las posibilidades de hacer las liquidaciones para el 30 de junio. "No estamos diciendo que definitivamente se va a hacer o que se va a hacer para todas (las agencias). Lo que se tomó con la orden es una medida para detener el desembolso en un momento en el que no lo podemos hacer".

La orden ejecutiva dispone que los empleados que no reciban el pago por el exceso de días acumulados por enfermedad, podrán usarlos como si fueran días de vacaciones. El mandato aplica a todas las agencias, con la excepción de la Rama Legislativa, la Rama Judicial, la Universidad de Puerto Rico, la Oficina del Contralor, la Oficina de Ética Gubernamental y la Comisión Estatal de Elecciones.

Estas entidades públicas que se excluyeron de la orden fueron seleccionadas, según Rivas, tomando en consideración factores como separación de poderes constitucionales y autonomía fiscal por asignaciones a través de fórmulas fijas.

Vila reconoció la preocupación que ha surgido en sectores como en la Policía de Puerto Rico y el Departamento de Educación, debido que se pueda registrar un ausentismo masivo que afecte los servicios. No obstante, espera que tras conocerse las razones que motivaron la suspensión del pago y las medidas que están tomando se puedan satisfacer las inquietudes.

En el caso de los policías, Rivas dijo que el año pasado se pagaron entre $29 y $30 millones en días acumulados por enfermedad.

"Dentro del plan de mitigación que van a estar presentando estos funcionarios, aquellos que prestan servicios esenciales, como la Policía y servicios importantes como los maestros, tendrán una consideración particular", afirmó.

Por otro lado, la orden también dispone que a las dependencias gubernamentales se le congelará el 30% de los "fondos no obligados" de sus presupuesto para contratos por servicios profesionales, compras de materiales y suministros, servicios comprados, equipo y otros gastos similares.

La explicación del Gobierno surgió en momentos en que han comenzado a producirse reacciones contra la orden ejecutiva del gobernador Alejandro García Padilla.

La orden OE-2013-014 se firmó el 28 de febrero y fue colgada, sin que se anunciara públicamente, en la página de Internet del Departamento de Estado.

"Debido a la situación presupuestaria que afecta a todas las agencias del Gobierno del Estado libre Asociado de Puerto Rico, se han comprometido los recursos del presupuesto de las agencias de modo que no son suficientes para el pago del exceso de las licencias de enfermedad", indica la OE-2013-014.

"Se prohíbe a toda agencia, cuyos gastos de funcionamiento se sufragan en su totalidad o en parte por el Fondo General, la utilización de fondos públicos, independientemente de su origen, para cubrir el pago de liquidación de licencia por enfermedad. Por consiguiente […] la licencia de enfermedad no utilizada por los empleados será acumulada y disfrutada de la misma manera que la licencia de vacaciones", agrega el documento.