En compañía de sus trillizos, Luis Roberto, Guillermo Luis y María Luisa, el gobernador Luis Fortuño entró y salió de la Academia San José con un propósito, "rajar la Palma", según dijo.

"Estoy muy orgulloso de poder votar por mi padre, pero, no solo por él, por un referéndum que puede decidir el futuro de Puerto Rico y que afecta a mi generación", dijo Guillermo Luis.

"Emocionado y muy contento. Por fin, llegó este día tan esperado", dijo, por su parte, Luis Roberto.

"Nerviosa, por ser mis primeras elecciones, pero muy contenta", sostuvo María Luisa.

Su padre, mientras tanto, exhortó a la ciudadanía a salir a votar.

"Todavía queda tiempo. Es importante que todos voten", manifestó Fortuño.

Tras votar, el gobernador iba rumbo a Fortaleza a hacer ejercicios en el gimnasio y luego a pasar la tarde en familia, en casa de un hermano. Será en horas de la noche cuando asista al comité del Partido Nuevo Progresista en Hato Rey.