Toa Baja. -  'Mucho con demasiao’.

En tan solo aproximadamente dos millas de la avenida Sabana Seca, el alcalde de Toa Baja, Aníbal Vega Borges, colocó 13 letreros para que a sus constituyentes no se les olvide que aspira a la reelección por un cuarto término.

Quizás no le suene mucho, pero sepa que en cada semáforo, no importa dónde mire, puede ver la cara del alcalde junto a la de Pedro Julio “Pellé” Santiago, considerado por algunos novopogresistas como un traidor, luego de que votó a favor del impuesto en la gasolina.

En el tramo de  la avenida Ramón Luis Rivera que corresponde a Toa Baja, la historia es similar: hay otros once letreros de gran tamaño.

En algunos casos hay uno pegadito al otro que es como estar viendo doble, o cuatruple si se considera que son dos caras en cada letrero.

Y no solo hay en las intersecciones con semáforos, también los hay en las áreas verdes antes de que te coja la luz roja.

Cada letrero está montado en carretones con ruedas o sostenidos con tablones de madera.

Del total que se colocaron en la avenida Sabana Seca hay dos de ellos en que el alcalde participa -en manga larga, planchadito y zapatos de vestir- de la construcción del Club de Leones Roberto Clemente que aun no termina.

El contrincante de Vega Borges, el ex representante Bernardo “Betito” Márquez, se tuvo que conformar con la mitad de rótulos en el mismo tramo, y mucho más pequeños que los del alcalde.

Según datos provistos por la Oficina del Contralor Electoral, en lo que va de año Vega Borges ha gastado $1,200 en rótulos y $609 en banners; de  julio a diciembre de 2015 se gastó $2,380 en letreros y $200 por la toma de fotografías.

El dinero para esos gastos proviene de su comité de campaña, no de las arcas municipales.

Al menos así se supone, si no quiere buscarse un lío bien feo, según  Jorge Ortiz Matías, director de campaña de Vega Borges y también su vicealcalde, quien dijo que los rótulos son la opción más económica para promover la candidatura junto con las caminatas que realiza a diario.

En contraposición, los pasquines que se ponen en superficies preferiblemente lisas son difíciles de remover “y como sabemos que vamos a revalidar nos tocaría a nosotros mismos sacarlos”. 

Agregó el director de campaña que los anuncios en prensa escrita, radio y televisión son demasiado caros.

“Nosotros utilizamos esta estrategia política relacionada a los famosos billboards que son los letreros grandes. Eso tiene su punto estratégico en todo el pueblo de Toa Baja. Nosotros los llevamos ya en varias campañas políticas. El gasto es menor que lo que uno va a tener en una campaña que pasquinar”,  afirmó en entrevista telefónica.  

“Es más efectivo. La gente lo ve a diario, están en puntos estratégicos que hemos escogido y hay varios en el mismo lugar de acuerdo a la dirección del tráfico”, abundó.

Ortiz Matías destacó que este tipo de rótulo gigante ha bajado en precio en comparación con años anteriores.

“Lo compramos a dólar el pie cuadrado y ese rótulo de unos 165 pies sale como en 170 dólares. Estamos hablando de que mide 12 pies x 16 que es el que estamos comprando y todo se costea con los dineros de la campaña política del comité municipal, con los donativos que se reciben o actividades que se hacen. Eso se rinde en informes a la Oficina del Contralor Electoral”, indicó el director de campaña.

Para quien piense que se trata de excesivo Ortiz Matías afirmó: “hay diferentes formas de hacer campaña. Sería excesivo 200 spots en televisión, pero por estas avenidas principales transita más del 50 por ciento de la población nuestra así que donde tengo que poner la promoción definitivamente es donde transita la gente. Si el otro no es visionario y no se le ocurrió hacer lo mismo, es falta de visión”.