Ponce. La ambulancia aérea adquirida el año pasado por el Departamento de Salud, a un costo aproximado de $8 millones, no está ni cerca de echar a volar pues no cuenta con los permisos federales y estatales necesarios.

El helicóptero está guardado desde finales de diciembre pasado en un hangar del Aeropuerto Mercedita en Ponce. La Comisión cameral de Salud, presidida por Juan Oscar Morales, realizó hoy una vista ocular donde se reveló la cadena de errores que han impedido que la nave haya volado siquiera una vez.

Junto a Morales estuvieron los representantes Jesús Manuel Ortiz, Lydia Méndez y Jackeline Rodríguez; el director ejecutivo de la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres y director interino de Emergencias Médicas, Abner Gómez; y el coronel Luis Colón, director de las Fuerzas Unidas de Rápida Acción (FURA) de la Policía de Puerto Rico, entre otros.

Gómez explicó que para operar una aeronave comercial se necesita obtener la Certificación 135 del reglamento de la Administración Federal de Aviación (FAA, en inglés) que, según su experiencia, tarda alrededor de un año. Para conseguirlo, el peticionario tiene que ser una corporación, pero en este caso ninguna de las agencias involucradas en la operación del helicóptero lo es: Salud, Emergencias Médicas y la Policía.

Durante la vista se dijo que la Policía está evaluando cómo sacar ese permiso porque es la que cuenta con los pilotos. Gómez pidió que se aclare si la Policía puede facturar y advirtió que una vez se otorga el permiso, el mismo no es transferible.

Sin esa Certificación 135, no se puede obtener el aval de la Comisión de Servicio Público ni de la Secretaría Auxiliar para Reglamentación y Acreditación de Facilidades de Salud, que es un ente del Departamento de Salud.

En términos tecnológicos, el inspector Glenn González, coordinador de servicios aéreos de FURA, dijo que la nave está óptima. Sin embargo, a pesar de que está capacitada para navegar bajo visión nocturna, los pilotos no están adiestrados para ello. Ahí habría que hacer otra inversión.

Además, le falta un foco o luz de escena (“spotlight”), aunque González dijo que no es requisito, y el radar Doppler. El helicóptero no tiene seguro y, por tanto, solo se encienden los motores ocasionalmente para que los fluidos corran, pero no se puede mover, señaló González.

Posteriormente, habría que ponerle el equipo médico quirúrgico, lo que le corresponde a Emergencias Médicas.

“Es lamentable que a un costo de $8 millones todavía el pueblo de Puerto Rico no pueda recibir un solo servicio de esta nave”, manifestó el representante Morales.

Salud le compró este helicóptero a la empresa Ecolift Corporation, por casi $8 millones y sin seguir el debido proceso de subasta. Actualmente, la Oficina del Contralor realiza una auditoría sobre el particular.

Gómez y Morales plantearon como solución la creación de una Alianza Público Privada (APP) pues, aunque se logre poner al día la nave, el costo operacional es muy alto para que el gobierno pueda sufragarlo.

“La única forma de adelantar esto es, una vez pase la auditoría, hacer una Alianza Público Privada. No hay más opciones para adelantar esto”, afirmó Gómez, quien estimó en $25 mil mensuales el costo de mantenimiento sin incluir el combustible y cada vuelo entre $2 mil a $3 mil.

La pasada secretaria de Salud, Ana Ríus, justificó la compra de este helicóptero con el argumento de que, al tener su propia ambulancia aérea, el país no dependería de los vaivenes de los proveedores privados. Eso, en el contexto de la deuda millonaria que mantiene el gobierno con Aeromed.

Morales indicó que Aeromed ha continuado operando a pesar de que Salud le adeuda alrededor de $7 millones y que el nuevo secretario, Rafael Rodríguez, está negociando la misma.