El pueblo puertorriqueño le envió hoy un claro y contundente  mensaje al gobernador Luis Fortuño: “Permiso denegado al Gasoducto del Norte”.

Miles de  personas en contra del tubo  que transportaría gas y que atravesaría  varios municipios de Peñuelas a San Juan rechazaron tajantemente la propuesta por el peligro ambiental y de seguridad que éste representa.

“Que acepte que su propuesta ha sido derrotada por el pueblo y que le toca abrazar otras opciones en el tema energético”, apuntó  Arturo Massol, de Casa Pueblo Adjuntas y quien tuvo a su cargo  el mensaje principal de la actividad.  

Sin embargo, el reclamo  pareció caer en oídos sordos, pues  simultáneamente el Gobernador, contrario a expresiones recientes, fue enfático al sostener que el proyecto sigue siendo una opción.

 “Lo que he dicho es que hasta ahora los expertos nos han dicho que ésta es la manera en  que menos se afecta el ambiente…  Yo, a diferencia de otros que viajan sin saber a dónde van o lo que invertirán, no permito que se invierta ni un centavo si no se ha verificado y reverificado que ésta es la mejor alternativa”, sostuvo Fortuño.

 “Lo que está diciendo el Gobernador con esa actitud es que él no escucha al pueblo, que él le va a declarar  la guerra al pueblo por  una obstinación. Si él no retira el proyecto, yo creo que este país lo va a retirar a él muy   pronto”, fue la reacción inmediata de Massol. 

Junto con el reclamo de detención al proyecto se exigió  que se  retire inmediatamente  la solicitud de permiso ante el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos, que cesen los contratos vigentes y no se otorgue uno más y que  se detenga el proceso de expropiación así como que se reviertan aquellas que se han materializado.

Fueron entre  5,000 y 7,000 personas, según estimados de los organizadores,  que participaron de la marcha que salió del Capitolio hasta La Fortaleza atravesando el Viejo San Juan. 

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Contrario a otras manifestaciones, aquí no hubo banderas de partidos políticos ni de organizaciones laborales. Sólo ondeo la monoestrellada a pesar de que sí hubo presencia de líderes  de la Pava y el Partido Independentista, así como de sindicatos.

Caminaron  desafiando el sol mientras coreaban el  estribillo, como: “Este tubo es un paquete, vamos a darle machete”. A través del trayecto, jóvenes representaron artísticamente  con sus cuerpos lo que, a su juicio, serían las consecuencias directas de un proyecto de esta magnitud.

Ya al filo del mediodía llegaron hasta la entrada de la calle Fortaleza, que estaba custodiada por  21 oficiales de la

Policía. Allí se ofrecieron diversos  mensajes, siendo el oficial el de  Massol.

Se trató de un mensaje directo hacia el Primer Ejecutivo.   Massol dijo a los manifestantes  que  detrás de la “apestosa” propuesta se esconde un “fraude” que el Gobierno ha hecho llamar Vía Verde. 

Dijo que el proyecto es un “montaje”, un “embeleco”  que se debe llamar “Gasotuño”. “No van a poner un clavo ni un tornillo, porque no se lo vamos a dejar”, apuntó.

En respuesta a expresiones de Fortuño de que no le asombraba la asistencia a la manifestación debido a la participación de cualquier partido principal,  Massol reconoció que fue una actividad política, pero no partidista. “Cualquier gestión que haga el pueblo en defensa de sus derechos y del ambiente es un acto político...”, sentenció.

Bárbara J. Figueroa colaboró con esta historia