Todo fue bien planificado. Primero la alcaldesa ponceña, María “Mayita” Meléndez, ordenó un estudio de necesidad en la comunidad Buyones, donde viven decenas de familias de escasos recursos. Luego, el Municipio estableció prioridades y ayer comenzó a llegar la ayuda.

Meléndez entregó materiales escolares para el inicio a clases, pero además anunció varios trabajos para atender las necesidades del sector. 

Las ayudas del Municipio comenzaron con una visita del personal de la Oficina de Servicios al Ciudadano, quienes realizaron un censo sobre las familias y sus necesidades. Luego se coordinó con diversas agencias estatales y municipales para atender los problemas comunitarios. Igualmente, se unieron los envejecientes de los centros de cuidado diurno, quienes apadrinaron a 45 estudiantes donándoles los artículos para el regreso a clases.

“Ver las caras de felicidad de estos niños y de nuestros viejitos contentos porque están ayudando a alguien que necesita me llena de orgullo y satisfacción. Mi misión con Dios es servirle a mi pueblo y no descansaremos para continuar brindado a todos los ponceños una mejor calidad de vida”, expresó la alcaldesa. Ésta apadrinó a los niños Ángel J. Montalvo Rodríguez, de 13 años, e Idalys Medina Rodríguez, de 8 años. 

Entre las ayudas brindadas a esta comunidad se destacan el reemplazo de alumbrado, desganche de árboles, limpieza de áreas verdes en la cancha y parque y recogido de escombros. Además, Obras Públicas Municipal instaló un letrero en la entrada con el nombre de la comunidad.

“A pesar de la crisis que atraviesan los municipios, no nos rendiremos luchando para que nuestra gente pueda tener una mejor calidad de vida. Nuestra prioridad es y siempre ha sido que todos nuestros estudiantes cuenten con los materiales necesarios para el comienzo de clases, que todos puedan tener una educación digna, en un ambiente sano y seguro”, reiteró la alcaldesa.