El comisionado residente en Washington, Pedro Pierluisi, y la delegada congresional de las Islas Vírgenes estadounidenses, Donna Christensen, enviaron una carta al Director del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés), Thomas R. Frieden, exigiendo que los CDC aumenten sus esfuerzos para combatir el chinkungunya en ambos territorios de Estados Unidos, se informó hoy mediante comunicado de prensa.

"Desde la perspectiva del gobierno federal, un brote de chikungunya en Puerto Rico se debe tomar tan en serio como un brote en Nueva York, Florida o Texas. La salud y la seguridad de los 3.6 millones de ciudadanos estadounidenses que residen en Puerto Rico no es menos importante que la salud y la seguridad de sus conciudadanos que viven en los estados, y es fundamental que el CDC actúe de una manera que sea consistente con este principio ", indicó el comisionado residente en las declaraciones escritas.

Personal de la oficina congresional del Comisionado Residente tendrán hoy una reunión informativa con Lyle Petersen, Director de la División de Enfermedades Transmitidas por Vectores del CDC, que administra los programas del organismo sobre enfermedades transmitidas por mosquitos.

En el comunicado, Pierluisi criticó la labor que hasta el momento ha realizado el gobierno local para enfrentar este virus.

"Hasta la fecha, la respuesta del Departamento de Salud de Puerto Rico (DS) al brote de chikungunya, especialmente en su comunicación con el público en la Isla, no ha sido efectiva ni ha ayudado a aplacar la preocupación del público. Está claro que el Departamento de Salud de Puerto Rico necesita ayuda del gobierno federal, tanto en términos de financiamiento como de experiencia ", dijo Pierluisi.

Según se desprende del comunicado, las últimas cifras del CDC reportaron que hasta el 30 de septiembre de este año, se habían confirmado en Puerto Rico 421 casos de transmisión local de chikungunya –virus que se transmite por la picada de un mosquito- y 45 en las Islas Vírgenes de Estados Unidos.  El DS cuenta con cifras mucho más altas, colocando el número de casos confirmados en aproximadamente 2,300 y el número de sospechosos en más de 8,000. Se cree que tres personas pudieron haber muerto por cusas relacionadas a esta enfermedad.

La carta enviada por Pierluisi y Christensen al CDC recuerda que enviaron una misiva similar a los funcionarios federales de salud hace cuatro años en relación al alto nivel de casos de dengue y que a raíz de esa carta, el CDC aumentó los fondos anuales anti-dengue a Puerto Rico y las Islas Vírgenes estadounidenses en un 60%, de $3.5 millones en el año fiscal 2008 a $ 5.5 millones en el año fiscal 2013.