La Junta de Gobierno del Partido Popular Democrático (PPD) decidió esta noche que boicoteará y hará campaña en contra del plebiscito sobre status pautado para el 11 de junio.

Según el presidente de la colectividad, Héctor Ferrer, el proceso está “amañado”, y se utilizarán millones de dólares, a pesar de que el resultado no es vinculante para el congreso estadounidense.

“No se puede validar un proceso como éste, excluyente, amañado y que busca darle una victoria a la estadidad que no tiene”, dijo Ferrer en conferencia de prensa tras culminar la reunión que se extendió por poco más de tres horas. El pleno tiene que ratificar la decisión en su Asamblea General convocada para el domingo en el Coliseo Guillermo Angulo de Carolina.

“Además, la ley aprobada por el PNP viola derechos principales del derecho electoral puertorriqueño... se elimina el sorteo de papeletas, y dicen ‘tú vas en esta columna porque yo quiero, y te toca este símbolo y esta posición y esta definición’ … eso es violentar los derechos básicos”, agregó Ferrer.

Un grupo de alcaldes de pueblos fuera del área metropolitana refrendaron la idea de no atender la consulta.

Alfredo “Papo” Alejandro, alcalde de Juncos, declaró que la posición “nuestra va a ser que nos tenemos que dar a respetar... la versión del (Estado Libre Asociado) ELA la debemos dar nosotros y esa alternativa no la vamos a presentar al presidente de la Cámara, ni al del Senado, ni a cuatro miembros del Partido Independentista. Se la vamos a presentar a la delegación popular, que serán los que digan el próximo domingo”, expresó.

Según Alejandro, el 90% de los alcaldes está claro en que esa es la mejor alternativa. 

Su homólogo de San Germán, Isidro Negrón, dijo a modo de broma que ese domingo del plebiscito se irán al cayo Caracoles de paseo, pues  “el proceso no es representativo de lo que los puertorriqueños piensan”.