Añasco -  El proyecto de reforma contributiva se está trabajando en consulta y con el insumo de distintos sectores comerciales y empresariales, cuya actividad podría verse afectada por el cambio en el tipo de impuesto sobre el consumo que se introducirá, informó este viernes el secretario de Hacienda, Juan Zaragoza.

Este proyecto “es complejo y requiere también participación de muchas industrias. Nosotros estamos tratando de que lo que radiquemos ya cuente con mucho del insumo de las industrias, los comerciantes y de las asociaciones”, sostuvo el funcionario.

Según Zaragoza, quien participó este viernes en una actividad de la Asociación de Alcaldes en el hotel Rincón Beach Resort, el objetivo es que no se someta legislación “en el vacío”, que tenga luego que ser enmendada cuando las organizaciones o sectores afectados reaccionen a lo propuesto.

“Estamos haciendo nuestra asignación y nos estamos tomando nuestro tiempo. La reforma va dirigida a transformar el sistema contributivo y enfocarnos más en el consumo. Ese impuesto que vamos a establecer, que es el IVA (impuesto al valor añadido o agregado), pues tiene unas particularidades, dependiendo de cada industria, y nos estamos reuniendo con los diferentes sectores comerciales para adelantarles cómo afectaría esa industria y tener el insumo de ellos”, explicó.

“De necesitar incorporar algún lenguaje a la ley, lo estamos haciendo”, puntualizó.

Zaragoza confirmó las expresiones que hizo ayer el gobernador Alejando García Padilla, de que la meta es presentar la medida ante la Asamblea Legislativa a mediados del próximo mes de febrero. “El proyecto está bastante encaminado. Estamos programados para que se radique el 15 de febrero”, dijo.

El titular de Hacienda reiteró que lo que se busca con la reforma propuesta es distribuir la carga contributiva entre más personas y particularmente capturar la llamada economía informal o subterránea.

“Hay que estar conscientes de que lo que se acabe diseñando es para distribuir la carga contributiva entre más gente y que los contribuyentes cumplidores, cualquier carga adicional que tengan en el consumo, la van a compensar con ahorros significativos en el área de contribución sobre ingresos”, señaló.

“Aquellos que no rinden planillas porque son personas de escasos recursos también se están diseñando unos mecanismos para compensarlos económicamente”, abundó.

Al final de cuentas, “si el cumplidor que rinde planillas recibe una reducción sustancial en la contribución sobre ingresos que neutralice la carga adicional en el impuesto al consumo, y el que no rinde contribución sobre ingresos, porque es de escasos recursos, recibe un pago mensual o algún tipo de subsidio para compensarla también ¿quién queda?: el de la economía informal, sea legal o ilegal, que no estaba en el sistema y que ahora va a tener que cargar también al fin con parte de la carga contributiva”, concluyó Zaragoza.