Tras los incidentes recientes provocados por desperfectos en las machinas de ferias, la Cámara de Representantes comenzó este lunes a revisar la política pública que regula esa maquinaria, y no descarta modificar los procesos de inspección de los equipos ni la reglamentación que aplica a los operadores.

El Cuerpo de Bomberos, la empresa operadora M&M Amusement Park y la empresa productora de eventos familiares Famma Events coincidieron durante una vista pública de la Cámara que las fallas detectadas tras el accidente ocurrido a principios de mes en las fiestas patronales de Hormigueros no obedecen a que se haya incumplido la ley, sino que el estatuto vigente carece de la fuerza necesaria para regular todos los aspectos relacionados con esta industria.

La Ley 345-1999 enmendó la Ley Orgánica del Cuerpo de Bomberos para darle a esa agencia la facultad de reglamentar el proceso mediante el cual se solicita autorización para manejar equipos mecánicos de diversión, pero esos oficiales carecen de la preparación técnica y el conocimiento específico sobre el funcionamiento del equipo.

De igual forma, la ley deja en manos de un ingeniero mecánico la inspección de las máquinas, y la expedición de una certificación para el uso de estas, pero la pericia de estos profesionales sobre el tema ha sido cuestionada por los propios miembros de la industria.

"Actualmente, se cree que es un ingeniero mecánico quien tiene que certificar las máquinas. ¿Por qué? No tienen la completa capacitación para esto. Es como poner a un médico generalista a hacer una operación de corazón", subrayó Luis Arturo Guzmán, principal ejecutivo de Famma Events, durante la audiencia pública de la Comisión cameral de Seguridad Pública.

A juicio de Guzmán, los criterios que deben guiar la inspección de las máquinas son los que ha establecido la National Association of Amusement Ride Safety Officials (NAARSO), que son los que rigen en Estados Unidos. El ejecutivo insistió en que el personal del Cuerpo de Bomberos debe certificarse con esa organización sin fines de lucro, y ser quien fiscalice el funcionamiento de las máquinas.

"¿Por qué los bomberos? Se elimina el factor económico. El dinero que se paga a los ingenieros se pondría en un fondo para seguir entrenando a los bomberos asignados a esta materia. Dado el compromiso que los bomberos tienen con la seguridad, y ya que son ellos quienes inspeccionan todo lo relativo a la parte eléctrica, son los llamados a ser entrenados y tener todo el control para certificar el uso de cualquiera de las máquinas", insistió.

Miguel Martínez, presidente de M&M Amusement Park, compañía operadora de la máquina que sufrió desperfectos en Hormigueros, y que dejó a varios menores lesionados, hizo el mismo reclamo al señalar que deben ser los bomberos los encargados del proceso. Afirmó que, de esa manera, se pueden evitar posibles conflictos de intereses.

Sin entrar en detalles, el operador de máquinas comentó que hay ingenieros que le han dado el servicio de inspección, y al mismo tiempo, le han ofrecido convertirse en socios de la empresa de máquinas de diversión.

"(Al ser los bomberos), no nos pone a merced de un profesional fuera del Gobierno... Capacidad tienen (los bomberos), lo que pasa es que no están adiestrados", dijo Martínez.

Tanto Guzmán como Martínez aseguraron que han tomado medidas adicionales de seguridad por iniciativa propia, y no porque la ley se los exija. El productor de eventos, a cargo de traer a la Isla cada año La Feria - The Park, indicó que se asegura de que, antes de que comiencen a operar las machinas, un inspector certificado por la NAARSO, procedente de Estados Unidos, examine cada uno de los aparatos mecánicos. Martínez, en tanto, dijo que ha tomado adiestramientos sobre diversos aspectos de seguridad, y que ha incluido algunas de esas medidas en sus protocolos internos.

El jefe del Cuerpo de Bomberos, Ángel Crespo Ortiz, reconoció que los inspectores de esa agencia cuentan con "un adiestramiento básico", pero advirtió que en la actualidad no tienen los fondos necesarios para suplirles el conocimiento técnico necesario al personal.

"Por tal razón, recomendamos que se identifiquen fondos destinados a la capacitación de inspectores del Cuepro de Bomberos, de ser necesario, para que estos puedan contar con herramientas adicionales al momento de la inspección de las machinas", señaló.

Crespo Ortiz también enfatizó que se refuerce la reglamentación que rige a los operadores de las máquinas para establecer disposiciones claras sobre la edad que deben tener, las prohibiciones en torno al consumo de alcohol o estar bajo los efectos de sustancias controladas, y sobre el tipo de preparación que deben tener para manejar el equipo.

El representante José Báez, presidente de la comisión legislativa a cargo de la investigación, dijo que todavía no han tomado una determinación respecto a los cambios que impulsarán en la política pública, pero manifestó que deben centrarse en la inspección y la reglamentación a los operadores. Resaltó que es necesario hacer un análisis de costo-efectividad para implementar la política que menos onerosa resulte al erario.

"A uno le gustaría que fuera una entidad certificadora que tuviera todo el expertise del mundo (la que guiara la inspección), pero si es muy costoso, hay que evaluarlo", puntualizó en entrevista con este medio.