Roberto O. González Nieves, Arzobispo de San Juan, y el reverendo Heriberto Martínez, Secretario General de la Sociedad Bíblica, urgieron hoy al gobierno a que se acoja al título 3 de la ley federal PROMESA para atender la crisis fiscal.

"Actualmente Puerto Rico se encuentra en una encrucijada. Por un lado, hay un camino que conduce a que nuestra gente sea tomada como rehenes por el caos que pueden producir las demandas de los fondos buitres por la deuda. Como Argentina, Puerto Rico será demandado por sus acreedores en la medida que estos intenten recobrar su dinero y cobrar sus deudas, identificando los fondos disponibles para el pago de pensiones, escuelas, servicios sociales y servicios de salud. La otra ruta nos dirige hacia el proceso de reducción de deuda que se nos prometió con la aprobación de PROMESA. Nos referimos al Título 3 de dicha ley, que provee el procedimiento de quiebras, que puede forzar un recorte en la deuda y garantizar un mayor nivel de transparencia en las finanzas de nuestra isla", rezan las expresiones de los líderes religiosos.

Ambos exhortaron al gobernador Ricardo Rosselló y a la Junta de Supervisión Fiscal a autorizar el Titulo 3 y los procedimientos de quiebras para la fecha del 28 de abril, antes que la protección para evitar las demandas contra el Estado Libre Asociado expire.

"Si la Junta de Supervisión Fiscal y el Gobernador no llegaran a actuar antes del 28 de abril, nos preocupa que Puerto Rico pudiera ser tomado como rehén de actores predadores y los fondos buitres. Si el Titulo 3 no se aprobara, sería mucho más difícil negociar un resultado positivo para nuestra gente, de este modo provocando más sufrimiento para los más vulnerables", agregaron.

Según ambos líderes,  la deuda debe restructurarse para procurar soluciones que combatan la  la pobreza, prevengan la austeridad, promuevan la transparencia, apoyen el desarrollo económico y garanticen la participación ciudadana.

"Nosotros oramos por todos los sectores que se ven afectados por esta crisis, nuestros niños y niñas, a su vez nuestros acreedores. Invitamos a que se unan a nuestras oraciones a todos aquellos que se verán impactados. Oramos por que juntos podamos alcanzar soluciones que protejan la dignidad de cada una de las personas por esta crisis", señaló.