La Comisión Especial para el Estudio de las Normas y Procedimientos Relacionados con la Compra y Uso de Petróleo por la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) prosiguió este martes la investigación sobre los procesos de compra de combustible en esa corporación pública con un minucioso análisis sobre los parámetros que se siguen para evaluar la calidad del producto que se utiliza en las plantas generatrices.

Durante el tercer día de vistas del organismo senatorial, se sentó a testificar el químico Abraham Ortiz, quien detalló ante los miembros de la comisión la manera en que se transporta el petróleo hasta la Isla, cómo se transfiere luego hasta los tanques de la AEE, y las muestras y exámenes que se realizan para confirmar su calidad.

Como parte del interrogatorio del investigador César López Cintrón, Ortiz, quien dirigió el Laboratorio de Control de Contaminación de la AEE desde 1987 hasta 1994, describió el proceso de análisis de combustible antes de que la entidad pública lo reciba formalmente. Señaló que el flujo de trabajo no especifica cómo se atenderían los casos en que el combustible no cumpla con los parámetros de calidad. En esta parte de la discusión se presentó un diagrama elaborado por William Clark, exadministrador de la Oficina de Compra de Combustible.

El deponente indicó, además, que en los puntos donde se recibe el combustible desde las barcazas solo hay un empleado de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), y que en ese proceso no hay ningún gerencial que lo supervise.

“No hay presencia de la gerencia de la Autoridad en los puntos de recibo”, dijo enfático.

“Es un puesto encargado del equipo de transferencia del combustible. Es la persona que pertenece a la unión, y una vez se decide recibir el combustible, la responsabilidad de hacer las conexiones y tener todo listo para que el combustible pueda ser transferido (a los tanques) y recibido”, abundó el químico.

Ortiz dirigió el laboratorio de la AEE hasta 1994, cuando la instalación fue cerrada y el proceso de muestreo y análisis del combustible pasó a manos privadas. Laboró en la corporación pública hasta que se retiró en 2014.

Durante su intervención, López Cintrón puntualizó que, el flujograma para la aceptación del combustible según los acuerdos con la Agencia federal de Protección Ambiental (EPA, en inglés), se incluye a manera de pregunta en uno de los pasos si el producto cumple con los parámetros requeridos, aunque, a esas alturas del análisis, el producto ha sido avalado y estaría listo para quemarse.

“Es inusual que aparezca la posibilidad de que el combustible no esté en especificaciones. No se supone que suceda”, respondió Ortiz ante ese señalamiento.

“Esta es una aceptación de la Autoridad de que reciben combustible fuera de los parámetros”, le planteó López Cintrón.

“Están anticipando la posibilidad de que eso suceda”, le ripostó el deponente asintiendo al comentario del exfiscal.

El esquema al que hizo referencia también fue preparado por Clark, quien estuvo en el ojo público en 2014 por la celebración de su retiro con una fiesta que supuestamente fue auspiciada por una compañía petrolera suplidora de la AEE. 

Al inicio de la vista, el presidente de la comisión especial, el senador Aníbal José Torres, anticipó que el testimonio de Ortiz se extendería durante todo el día.