La sesión de la Cámara de Representantes de hoy comenzó con la pugna que libran el portavoz de la delegación del Partido Popular Democrático (PPD), Rafael “Tatito” Hernández Montañez y los representantes soberanistas Luis Vega Ramos, Manuel Natal y Luis Raúl Torres.

Hernández Montañez planteó en turno inicial que Vega Ramos y Natal ya no formaban parte del caucus popular.

El vicepresidente de la Cámara, José “Pichie” Pérez denegó sin embargo, una moción de Hernández Montañez con la que buscaba que no se cargara al tiempo de la delegación popular, los turnos de Natal y de Vega Ramos.  

Tanto Vega Ramos como Natal insistieron en que no han renunciado al caucus del PPD ni a ninguna de las comisiones legislativas de las que forma parte como miembros de la minoría popular y que la determinación del portavoz de sacarlos del caucus era “ultravires, ilegal e improcedente”.

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No obstante, las bancas de Natal y de Vega Ramos fueron reubicadas, detrás de la delegación pepedé, junto con la del representante Torres, quien el pasado 4 de abril renunció al caucus popular por diferencias con el Portavoz de delegación.

Mientras tanto, en la Plaza de la Democracia del Capitolio comienzan a congregarse unionados de diversos sindicatos opuestos al Proyecto 938, que según el liderato sindical, elimina derechos adquiridos y la negociación colectiva.

El polémico Proyecto antes mencionado no figura en el único calendario de medidas circulado hasta el momento en la Cámara.

Poco después de las 2 de la tarde, la Cámara recesó sus trabajos para reanudar posteriormente.

Sin embargo, en horas de la mañana el presidente de la Cámara, Carlos “Johnny” Méndez no descartó que la medida sea bajada a votación hoy miércoles.

Méndez dijo que esta tarde se reuniría el liderato legislativo con el equipo de asesores de La Fortaleza en busca de armonizar un lenguaje de consenso sobre la aportación al plan médico de los empleados públicos, lo que según el líder cameral es la único diferendo en este momento.

“En todo lo demás estamos cómodos. Sólo nos sentimos incómodos con lo del plan médico”, sostuvo Méndez.

Dijo que unos 26 mil empleados de las corporaciones públicos se verían afectados con una dramática reducción en la aportación al seguro médico.