Tiemblan los líderes comunitarios y la ex gobernadora Sila M. Calderón ante la posibilidad de que desaparezca el Programa de las Comunidades Especiales.

La ex gobernadora catalogó como “una desgracia para Puerto Rico” que esa oficina haya sido prácticamente desmantelada por la pasada administración.

Ante las declaraciones del secretario de Asuntos Públicos de La Fortaleza, Jorge Colberg, de que aún no se sabe qué pasará con el proyecto, Calderón dijo que en el programa del Partido Popular Democrático hay consignado un compromiso con la autogestión y apoderamiento de las comunidades pobres.

“No sé a través de qué vehículo lo van a hacer, pero mi aspiración sería que fuera este (la Oficina de Comunidades Especiales), o uno similar”, dijo.

La ex mandataria –artífice de la iniciativa de Comunidades Especiales– lamentó que otros países de América Latina y Europa hayan copiado ese modelo y aquí lo hayamos dejado caer.

Calderón urgió del gobierno de Alejandro García Padilla que “le dé la misma prioridad, el mismo grado de recursos y un personal especializado” a cualquier programa que venga a sustituir al suyo.

Eliminar la Oficina de Comunidades Especiales o relegar a un segundo plano el proyecto actual o uno nuevo “sería una barbaridad, un error garrafal”, según el líder del barrio Sonadora, en Guaynabo, Wilfredo López Montañez.

Este dijo que sería “incongruente” que García Padilla reclame que hay que atender con prioridad la desigualdad, la violencia y marginación “y que no comprenda que es a través de Comunidades Especiales que eso se puede hacer”.

En una entrevista con Primera Hora, Colberg explicó que la Oficina de Comunidades Especiales no tiene dinero y la están operando con unos 10 empleados. Insistió en que el gobernador tiene un compromiso con la lucha por erradicar la pobreza y que esta administración “no puede renunciar a eso, irrespectivo de la existencia o no de esa oficina (la de Comunidades Especiales)”.

Colberg precisó que el Gobierno estará evaluando “qué modelo gubernamental o legislativo puede usarse para atender la pobreza”.

El líder de la comunidad de Canteras, José Santiago Reillo, expresó ayer que, durante la campaña electoral, el gobernador le dijo al liderato comunitario que iba a continuar con el proyecto, pero que no sabía si se llamaría Comunidades Especiales o tendría otro nombre.

“El nombre de Comunidades Especiales está manchado”, admitió Santiago Reillo, consciente además de que este gobierno “no tiene el montón de chavos” que tuvo el de Calderón para la iniciativa.

“Estamos a la espera y no con los brazos cruzados”, agregó.

Primera Hora supo que hoy, a las 10:00 a.m., habría una reunión en La Fortaleza con varios líderes de comunidades y la secretaria de la Gobernación, Ingrid Vila. Los líderes van a presentar un plan de acción para el programa.