Líderes del Movimiento Socialista de Trabajadores (MST) respaldaron este domingo al exlíder estudiantil Ibrahim García, quien fue objeto de críticas la semana pasada por la manera en que se dirigió a la exgobernadora Sila M. Calderón durante una protesta en contra de la privatización del aeropuerto a las afueras del Centro para Puerto Rico, en Río Piedras.

A juicio de Hugo Delgado, portavoz del MST, y de Ana Huertas, del Caucus de la Mujer de esa organización, la difusión que recibió el incidente en los medios convencionales y las redes sociales se salió de proporciones, y se le intentó dar un matiz machista a las expresiones sin que, según los socialistas, esa fuera la intención de García.

“Que se diga que eso es machista nos ofende”, dijo Huertas, al plantear que ha sido el Gobierno el que ha mantenido un trato discriminatorio contra las mujeres, entre otras razones, al no atender efectivamente los incidentes de violencia de género y no adoptar un programa de perspectiva de género en el sistema público.

“Un estudiante le dice unas palabras a la exgobernadora Sila Calderón y rápido es machista. Esa acción, para nosotros, no es machista porque a ella no se le dijo nada. No puedo usar la palabra 'atacó' porque eso no fue un ataque. Le dijo esas palabras, no porque era mujer, sino porque ella representaba un gobierno que lo que ha hecho es explotar a la mujer, explotar al trabajador”, sostuvo.

“Nosotras somos feministas, pero también somos socialistas, y entendemos que pertenecemos a una clase social a la que no pertenece ella, y ella representa un estado que nos reprime”, abundó Huertas.

El incidente ocurrió el jueves durante una protesta en la que un grupo de activistas en contra de la alianza público-privada (APP) del aeropuerto internacional Luis Muñoz Marín bloqueó la salida vehicular que debía tomar el gobernador Alejandro García Padilla, quien se encontraba en una comparecencia oficial en el Centro para Puerto Rico de la Fundación Sila M. Calderón.

Cuando la exmandataria trató de intervenir para que le permitieran sacar su vehículo del estacionamiento, García le replicó: “Si usted tiene otro carro, váyase, nosotros estamos aquí en protesta. A nosotros lo menos que nos importa es lo que haga usted".

El exdirigente estudiantil, quien fue expulsado de la Universidad de Puerto Rico (UPR) por incidentes relacionados con la huelga de 2010, gesticuló con las manos mientras hablaba, no miró de frente a la exgoberndora, y se volteó tan pronto culminó sus expresiones.

Calderón, en tanto, pidió respeto, y cuestionó el proceder del joven, a quien le enfatizó que ella es “una señora”.

El manifestante, entonces, le indicó que se dirigía hacia ella como lo haría con cualquier otra persona, independientemente de su género. "Yo le hablo a usted como a cualquier persona en esta posición. Si usted es mujer o es hombre, a mí me hace poca diferencia", sostuvo entonces García. 

Para Delgado, la atención que recibieron las declaraciones de García responde al afán de algunos de descarrilar las iniciativas que se han encaminado en reclamo de que el joven pueda regresar a la UPR a completar sus estudios.

“El problema no es que sea una mujer, el problema es que es una figura de autoridad. Un problema que hay en Puerto Rico es que se puede maltratar a todo el mundo menos a los ricos y poderosos”, señaló Delgado al insistir que “se exageró sobre el tema” con el objetivo de “desprestigiar a la juventud”.

“Se trata de vincular esta acción a la otra (la huelga estudiantil) para evitar que se restituya (a García) a la universidad”, puntualizó el portavoz del MST.