El nuevo jefe del Cuerpo de Bomberos, Ángel A. Crespo, catalogó como "remota" la posibilidad de que en Puerto Rico ocurra una situación similar a la que se registró en Brasil, donde unas 231 personas perdieron la vida durante un incendio en una discoteca.

Crespo atribuyó la diferencia a los estrictos códigos contra incendios establecidos en la Isla desde desde la tragedia en el Dupont Plaza en 1986, cuando murieron unas 99 personas.

Según fuentes oficiales del gobierno de Brasil, 231 personas fallecieron y 112 resultaron con diversos tipos de heridas en el incendio que surgió en la discoteca Kiss, en la ciudad de Santa María, al sur de Brasil.

"En Puerto Rico la posibilidad de que esto ocurra, la considero como remota, debido a que la Reforma de Seguridad Contra Incendios se llevó a acabo inmediatamente después del Dupont Plaza", sostuvo Crespo.

"En muchos de países no hay códigos de prevención contra incendios o no tienen una política pública de protección y prevención contra incendios como la tenemos en Puerto Rico", agregó.

Según las primeras investigaciones, el fuego comenzó en el techo acústico por pirotecnia que se encendió como parte del espectáculo.

 También habría contribuido a la tragedia el pánico provocado por la rápida expansión de la humareda y por la supuesta decisión de los vigilantes de cerrar las puertas para evitar que el público saliese sin pagar, según los bomberos. La difícil evacuación y la avalancha de personas corriendo hacia la única salida causaron numerosas muertes por asfixia.

 En el caso de Puerto Rico, Crespo explicó que la ley aprobada después del incendio en el Dupont Plaza facultó a los bomberos, entre otros aspectos, para exigir a todos los establecimientos que tengan varias vías de salida. También pueden determinar un máximo de capacidad, con potestad para cerrarlo si se viola ese tope.

El funcionario señaló que en la Isla hay unos 115 inspectores a cargo de velar por el cumplimiento de estos códigos.

"No debe pasar que alguien inflame una bengala dentro de un lugar cerrado en Puerto Rico. A todos los lugares en Puerto Rico se le asigna una capacidad máxima de personas permitidas por medios de salidas. Los bomberos sabemos cuántas personas pueden salir por minuto, tomando en consideración la anchura de las puertas", afirmó.