Sí, es él… el secretario del Departamento del Trabajo, Vance Thomas, parece otra persona tras rebajar más de 40 libras luego de someterse a un estricto plan alimentario y de ejercicios.

El evidente cambio en el cuerpo del funcionario  es el resultado de un  estilo de vida que asumió hace siete meses, cuando decidió modificar su dieta y comer más saludable para tratar de adelgazar las libras que engordó poco a poco durante los pasados años.

“Hace años dejé de cuidarme y la verdad es que había empezado a sentirlo en el ánimo y en la energía. Además, amigos de hace muchos años que me veían me decían: ‘Vance, tienes unas libritas de más’. Entonces, un buen día decidí por mi cuenta comenzar un cambio”, destacó el secretario al agregar que también presentaba problemas con el colesterol y los triglicéridos.

Explicó que una máquina de hacer ejercicios  que le había regalado su esposa hacía más de tres años -y que apenas había utilizado- fue su primera aliada en el proceso que comenzó en el verano pasado.

“La elíptica estaba en la sala y mi esposa a cada rato me lo recordaba. Me decía:  ‘Podemos botarla o venderla, pero haz algo’. Entonces, empecé por ahí, sin personal trainer ni gimnasios. Todas las noches, después de salir del trabajo, llegaba fielmente a meterle una hora y media a la máquina”, manifestó el  funcionario, quien tiene 50 años.

Explicó que tras llegar a su peso ideal - de 200 a 155 libras- redujo la intensidad del ejercicio a solo 45 minutos al día.

“Pero ahora voy a combinarlo con pesas porque algunos amigos me lo han recomendado”, añadió.

En cuanto al régimen alimentario, indicó que prácticamente  lo que hizo fue reducir porciones de comida pues no es amante de los dulces ni de las frituras.

Fuera el arroz y más pollo

“Podría decir que dejé el arroz y en la dieta incluí más pollo. Sólo comía carne roja una o dos veces a la semana. Eso sí, también dejé el refresco. Hace más de ocho meses que no tomo refrescos y eso fue un cambio drástico”, cuenta Thomas, quien rompe dieta los sábados pues es el “día de cine” en su hogar y no puede dejar la tentación de comer popcorn.

Además, dijo, como regla general no consume alimentos luego de las 7:30 de la noche.

“Todo este cambio lo logré por fuerza de voluntad y una disciplina que no sabía que tenía. Ahora solo espero poder mantenerme porque yo sé que hay muchas tentaciones”, dijo el secretario del Trabajo.

Gordito o flaquito con la misma ropa

Mientras, sus amistades -incluido el gobernador Alejandro García Padilla- lo están instando a renovar su clóset pues, aunque ha bajado varias tallas de ropa, sigue utilizando la misma.

“El otro día el gobernador me dijo:  ‘¡Oye, los sastres comen, sabes!’”. Y por ahí hay un club de gente que se pasa regañándome y diciéndome que compre ropa porque no se me ve bien la que me pongo… es que me  sigo poniendo los mismos gabanes”, expreso riéndose el funcionario.