La casa de dos niveles que tiene Víctor Cerda en la comunidad Vietnam, en Guaynabo, parece estar habitable. Es en cemento, está pintada y tiene ventanas francesas blancas que lucen en buenas condiciones. Sin embargo, frente al portón de entrada le han colocado un letrero del municipio que lee “Aviso. Preliminarmente se ha declarado esta propiedad como estorbo público”.

Otras tantas estructuras en la zona, que sí lucen irremediablemente dañadas, deshabitadas y abandonadas, no lo tienen.

Cerda, parte de la organización “Residente Unidos en Lucha por Vietnam”, guió hoy, sábado, a la senadora popular Rossana López León en una vista ocular por las calles de la comunidad para que ella pudiera ver la falta de mantenimiento y de servicios básicos en esta área. Le acompañaron el presidente de la asociación de residentes, Alfonso Lugo, y Carmen Díaz, quien vive allí hace 34 años, entre otros vecinos. 

“Nos tienen abandonados”, repitió Cerda varias veces mientras mostraba pastizales, alcantarilladas cubiertas de matojos, con las tapas sueltas; hidrantes perdidos entre la maleza y escombros acumulados en solares baldíos que dijo, eran depositados allí por personal del municipio de Guaynabo. 

Según explicaron varios de los residentes, la intención de la administración del alcalde Héctor O’Neill es apropiarse del espacio que tiene una envidiable vista a la bahía de San Juan para construir el Guaynabo City Waterfront. Desde allí, se puede ver el Centro de Convenciones en Miramar, parte de Santurce, los cruceros que atracan en los muelles y el Viejo San Juan.

El hombre dio testimonio de las ocasiones en que los hogares de sus vecinos han sido visitados por empleados del municipio que los presionan, con mayor insistencia desde 2011, y les ofrecen unos $30,000 por las viviendas que les han tomado una vida levantar, y ubicarlos en otras residencias.

La estrategia, describió, incluye declarar algunas casas, como la suya, estorbo público con la intención de restarles valor a las demás estructuras que le rodean. “Es una forma de presionar a los residentes y a los dueños. Al declarar la casa estorbo público, hay que ir a unas vistas, llevar unos documentos… Ellos amenazan, que hay que pagar por el mantenimiento y hay que pagar lo que el municipio invierta en arreglar la casa. El reclamo es que nos dejen vivir en paz en nuestra comunidad. No estamos opuestos a los desarrollos de Puerto Rico, pero sí al abuso que puedan tener con las personas”, apuntó Cerda.

Además, dijo, el servicio de recogido de basura y escombros es irregular, al igual que la vigilancia. Por otra parte, cuando se realizan las demoliciones de estructuras, no se toman medidas de mitigación, por lo que el polvo se esparce por toda el área afectando a niños, ancianos y a asmáticos. 

De la comunidad, que en algún momento llegó a contar con casi 600 familias, solo quedan unas 250, se indicó.

La vista ocular que realizó la senadora es parte de la investigación a cargo de la Comisión de Derechos Civiles, Participación Ciudadana y Economía Social del Senada, que ella preside, “respecto a las expropiaciones forzosas iniciadas por el Municipio de Guaynabo de propiedades localizadas en terrenos identificados como pertenecientes a comunidades especiales por la Oficina del Coordinador General para el Financiamiento Socioeconómico y la Autogestión”.

López León hizo notar el problema de deterioro de las carreteras y escombros que traen consigo mosquitos y sabandijas, pero también resaltó que ha notado el daño psicológico que los vecinos han estado sufriendo por las amenazas de desalojo y las continuas presiones a las que son expuestos.

“Se ven atropellados, se ve que no tienen los recursos que tiene quizás un municipio para llevar un abogado, tienen visitas de una persona de (Departamento de) Vivienda que viene y los amenaza que si no se van, no le puede pagar $1 por la casa…”, apuntó. 

La legisladora indició que la comisión realizará un informe.

“Si hay algún señalamiento, en cuanto a violación de ley, lo vamos a establecer. Por eso quise venir. Porque no es lo mismo estar en el Senado que venir”, expuso la senadora.