Caguas- Un reclamo contundente de mejores servicios y ofrecimientos para los militares puertorriqueños que han servido en el Ejército de los Estados Unidos dominó la ceremonia del Día del Veterano, que se celebró hoy, martes, en el Coliseo Héctor Solá Bezares, en Caguas.

 Aunque ha habido importantes avances, tanto el comisionado residente, Pedro Pierluisi, como el procurador de Veteranos, Agustín Montañez, reconocieron por separado que todavía el trato que reciben los soldados tras sus días de servicio militar no compensa el sacrificio que han hecho.

“Yo he estado vigilante ante los reclamos de servicios deficientes que se han hecho en contra del Hospital de Veteranos de San Juan, así como de varios otros en Estados Unidos”, afirmó Pierluisi durante su mensaje. “He enviado múltiples misivas al secretario de Asuntos del Veterano sobre las quejas del retraso en atención médica, la falta de servicios de salud mental y sobre muchos otros asuntos que atiendo en mi oficina a diario”, sostuvo.

Comoquiera, el también presidente del Partido Nuevo Progresista celebró el anuncio que hizo ayer el nuevo secretario de Asuntos del Veterano de Estados Unidos, Robert McDonald, sobre una reestructuración de la agencia federal y aseguró que estará pendiente de que se apliquen en Puerto Rico todos los cambios positivos. Consideró, además, un gran avance la asignación de $100 millones para la construcción de una nueva clínica en Ponce que duplicará en espacio a la existente.

“Hemos mejorado grandemente, pero todavía hay mucho por hacer”, dijo, por su parte, Montañez. “Todavía no hemos llegado al punto de decir que esos beneficios sean equivalentes a los sacrificios que han tenido”, añadió el veterano de la Guerra del Golfo Pérsico.

 Mientras, el secretario de Estado, David Bernier, quiso enviar un mensaje inspirador en su discurso en el que exhortó al resto de los puertorriqueños a que asuman las virtudes de valentía y desprendimiento de la figura del veterano para la construcción del país que queremos.

La actividad del Día de Veterano, que se celebra cada año en honor de quienes han servido en el Ejército de Estados Unidos, fue dedicada esta vez a los cerca de 65,000 puertorriqueños que participaron de la Segunda Guerra Mundial, entre 1939 y 1945.

De manera especial se reconoció al veterano Martín Morales, quien justo hoy cumplió 103 años, y a Carmen García Rosado, una de las primeras mujeres puertorriqueñas en servir, como parte del Cuerpo de Mujeres del Ejército (WACS, por sus siglas en inglés).

El evento estuvo matizado por la satisfacción que generó la entrega de la Medalla de Oro del Congreso en junio pasado al antiguo regimiento 65 de Infantería, la última unidad segregada de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos y que estuvo integrada principalmente por puertorriqueños.

Los soldados del 65 de Infantería, conocidos como los Borinqueneers, y el beisbolista Roberto Clemente, son los únicos hispanos en la historia en recibir la Medalla de Oro del Congreso, el reconocimiento más alto por logros y sacrificios excepcionales.