Un proyecto que enmienda la Ley 54 de violencia doméstica para ampliar sus definiciones y cobertura a las “relaciones intrafamiliares” fue objetado por cuatro agencias de gobierno que comparecieron hoy, martes, ante una comisión cameral que evalúa la medida.

El Proyecto de la Cámara 650, de la representante del Partido Nuevo Progresista, María Milagros Charbonier, enfrenta el rechazo de la Oficina de la Procuradora de las Mujeres, el Departamento de Justicia, el Departamento de la Familia y reservas de parte de la Policía.

La principal objeción levantada por las representantes de todas estas agencias es que las enmiendas que propone el proyecto son contrarias al objetivo que originó la Ley 54, que fue atender la violencia y el maltrato en las relaciones de pareja.

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“Entre los innumerables aciertos de la Ley 54-1989 se encuentra el remedio civil de las órdenes de protección y el remedio criminal contenido en los delitos establecidos, precisamente porque el esquema jurídico de la Ley toma en consideración ofensas y daños individuales y sociales de mayor magnitud que cuando se cometen situaciones similares constitutivas de delito entre personas extrañas entre sí”, sostuvo la secretaria de la Familia, Idalia Rondón en ponencia que presentó la abogada Olga López ante la Comisión de Asuntos de la Mujer y Equidad de la Cámara de Representantes.

“Además, considera la diferencia en las características, manifestaciones y consecuencias de un acto de violencia que se da entre personas que comparten una relación íntima, pues es esta última una situación muy delicada, revestida de particularidades que se dan sólo en el contexto de una relación de pareja y que requiere un tratamiento distinto en atención al valor que se quiere proteger”, agregó.

En términos similares se expresó la procuradora de las Mujeres, Wanda Vazquez, en ponencia que presentó la abogada Josefina Arroyo. “La Oficina de la Procuradora de las Mujeres no recomienda ni apoya medidas que puedan confundir la naturaleza del estatuto y que puede confundir algo que a nuestro juicio está bastante claro en la Ley”, sostuvo.

“Las enmiendas presentan un ejercicio oneroso de presentación de prueba que lejos de extender la aplicación de la presente Ley puede provocar la impunidad de agresores”, sostuvo por su parte el secretario de Justicia, César Miranda, en ponencia que presentó la abogada Viviana Cátala.

En su escrito Miranda rechaza los cambios que propone la medida para sustituir el término “cohabitar” con el de “convivir” y afirma que “bajo la definición de convivir se podrían incluir todo tipo de relación entre personas, aún si éstas son o no parejas, hayan tenido o no una relación sentimental”.

La propuesta de la legisladora sustituye también en todo el texto de la Ley 54 la frase “violencia doméstica” por la de “maltrato y violencia doméstica e intrafamiliar”.

El Superintendente de la Policía, Jose Caldero, representado por su asesora legal, Estrellamar Vega, apoyó algunos de los cambios pero cuestionó también la ampliación de la cubierta de la Ley a las relaciones intrafamiliares y rechazó que se elimine el requisito de la Ley 54 de la existencia de una relación íntima entre los implicados.

“Puntualizamos el hecho de que no estamos de acuerdo que se amplíe la configuración de la violencia doméstica a relaciones entre miembros de la propia familia”, sostuvo.