Tres querellas por los delitos de alteración a la paz y daños a la propiedad fueron radicadas ayer por choferes de la red de transporte UBER con relación a varios incidentes reportados en el Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín y frente al Hotel Intercontinental en Isla Verde.

En caso más reciente ocurrió ayer, sábado, a las 9:50 p.m. frente al Hotel Intercontinental de Isla Verde cuando alguien le lanzó una piedra y le ocasionó daños al baúl de un automóvil Hyundai Accent, color vino, propiedad del conductor de UBER, José V. Arocho Ortiz.

La querella por daños fue investigada por el agente Héctor Bernard quien indicó que no se había identificado al sospechoso.

Asimismo, a las 8:00 a.m. en el Terminal B del aeropuerto internacional desconocidos le ocasionaron daños a la puerta trasera derecha del auto Kia Soul, del 2013, a un chofer de la red de transporte identificado en la querella como Francis J. Hayes Vélez.

Posteriormente, a las 5:50 p.m. Frances Molina González, conductora de UBER denunció que mientras se encontraba en el mismo terminal en la salida de los pasajeros de la línea aérea Jet Blue un presunto taxista le dio una patada en el lado izquierdo de su vehículo marca Nissan Sentra, del 2013. Además, le gritó y quería obligarla a bajar a su pasajero.

Este caso fue citado para el 16 de mayo al Tribunal de Carolina ya que el individuo fue identificado. El agente Luis Fernández está a cargo de la pesquisa.

En ninguno de los casos se ofreció un estimado de los daños.

La situación surgió luego de que el gobernador Ricardo Rosselló Nevares le ordenara a la Compañía de Turismo que emitiera una orden administrativa para permitir que autos privados ofrezcan transportación en el aeropuerto ante la falta del servicio de transportistas que decretaron un paro el viernes pasado.