El cierre total de las colecturías en la Isla es cuestión de tiempo.

La secretaria del Departamento de Hacienda, Teresita Fuentes, confirmó que “nos estamos moviendo a cerrar colecturías y mover transacciones a otros puntos de ventas que serán más convenientes para el contribuyente”. 

Ante la pregunta de si en un futuro estos centros desaparecerán, la respuesta fue “sí”.

“El plan es ir cerrando colecturías. La intención es que desaparezcan por la razón de que yo prefiero reubicar ese personal para que me opere y me trabaje donde yo lo necesito; que es cobrar deudas, hacer planes de pago, fiscalizar”, sostuvo la contadora pública autorizada.

Al momento, han cerrado 28 colecturías, y unas 30 permanecen ofreciendo servicios.

Fuentes aceptó que independientemente de la cantidad de ciudadanos que se atiendan en los distintos centros, el cierre no lo detiene nadie. 

Ejemplificó que en el caso de Bayamón, hay 11 sucursales bancarias y dos cooperativas donde el contribuyente tiene opciones para hacer sus transacciones.

“El futuro del Departamento de Hacienda es digitalizarse, moverse a otras opciones que no sean las colecturías. Eso por muchas razones. Tenemos que usar nuestro personal donde hace sentido, que es en el cobro de las contribuciones, donde nos resuelven mucho más para propósitos de cumplir con el plan fiscal que tenemos ahora mismo y, eventualmente, a reducir el costo de mantener todas esas colecturías abiertas y darle, a la misma vez, mayor servicio al contribuyente”, explicó.

Recordó que desde que ella estuvo en Hacienda, “en los (años) 90, estamos hablando de cerrar colecturías y no se había podido lograr. Ya ahora se dio un paso afirmativo cerrando, porque en cada pueblo donde tú tienes más de una colecturía, eso significa una renta que estás pagando; empleados que están a lo mejor trabajando, si hay mucho tránsito y a lo mejor no, y están ahí sin poder hacer otras cosas”.

Dijo que es “completamente ineficiente porque puede ser que (estos empleados) estén sentados esperando que entre alguien a comprar un sello o puede ser que haya mucha gente, entonces eso me cuesta que los supervisores, acá en San Juan, tengan que estar moviendo gente de un lado para otro”.

Fuentes argumentó que eso tiene un impacto económico porque tienes a un “empleado que se tiene que montar en su carro, ir a otro lugar; ahí perdió sabe cuánto tiempo desde que se movió del punto A al punto B; eso es ineficiente, ese no es el modelo del futuro y yo te aseguro que ninguna empresa privada se corre así”, sentenció. 

Sin embargo, no precisó cuándo cerrarán todas las colecturías.

“No se cierran todas de cantazo. El proceso tiene que ir poco a poco para que no sea un menoscabo en el servicio… Porque si se apagó todo de momento, entonces sí afecto el servicio. Tenemos que ir acostumbrando a la gente a que poco a poco sepan que tienen otras opciones… Orientarlas dónde pueden realizar sus transacciones”.

Para el año 2014 se cerró la primera colecturía.

“Este ha sido un deseo de muchos secretarios que llegan aquí, que ven que tienen muchos recursos afuera y mucho gasto y no hace sentido”, mencionó.

Sin embargo, aceptó que romper con los paradigmas coge tiempo.

“La gente, más que nada, se acostumbra a que tengo la colecturía cerca… Los alcaldes también quieren decir que tienen sus colecturías (en sus pueblos)… La resistencia al cambio es lo que siempre nos pasa”, insistió al agregar que ahora hay una sucursal bancaria en todos lados.

“Son opciones que le permiten al contribuyente, no necesariamente ir a una colecturía donde se está vendiendo un sello y un comprobante”, insistió a Primera Hora.

En el caso de la venta de marbetes, dijo que “la idea es que estos se vayan completos a través de la banca y las cooperativas”. 

Eventualmente, reiteró, todas las transacciones que se hacen ahora en las colecturías se pueden “externalizar a la empresa privada…”.

“Ahora mismo también puedes pagar contribuciones (en las colecturías), pero igual la gente debe pagar contribuciones por internet, por colecturía virtual y no tienen que salir de su casa. De hecho, el 90% de los pagos de contribuciones me dicen que ya están haciéndose por colecturía virtual. Casi en todos los hogares de Puerto Rico hay computadoras. ¿Para qué moverse de su casa si lo puede hacer desde su propia computadora?”, cuestionó. 

Recordó que también el Gobierno se está moviendo a abrir Centros 360 donde ofrecen todo tipo de servicios.

Sobre la posibilidad de que haya un aumento en el costo de los servicios, Fuentes indicó que hay que hacer un análisis costo-beneficio.

“Lo que tienes que ver es cuánto le cuesta la hora a esa persona de estar parada en una colecturía, o de montarse en el carro y guiar hasta la colecturía, versus cuánto le cuesta trabajar o hacer la transacción en tu casa, de manera digital, o ir a la banca; porque a lo mejor esos cinco pesitos que está pagando de más, estás perdiendo de ganarte una hora de trabajo. Así que es un análisis de costo-beneficio para cada persona”, mencionó la secretaria de Hacienda.