El contralor electoral, Walter Vélez Martínez, advirtió que el recorte propuesto por la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) al presupuesto para el año 2018-19 de la Oficina del Contralor Electoral, afecta el proceso de fiscalización del financiamiento de campañas políticas, precisamente en el momento que esa oficina se encuentra inmerso en las auditorias del proceso electoral 2016.

Según la OCE, el presupuesto aprobado para el año fiscal 2017-2018 en la Oficina del Contralor Electoral fue de $3,223,000. El presupuesto recomendado por la JSF para el año fiscal 2018-2019 es de $2,665,000. Esto representa cerca de un 17% de su presupuesto de un año a otro.

Y no es el único recorte de OCE en los pasados años. Según Vélez Martínez, “desde el 2011, año en que se creó la Oficina del Contralor Electoral, los recortes ascienden al 45% del presupuesto inicial, con una reducción total de dos millones doscientos catorce mil dólares ($2,214,000). Sin embargo, hicimos los ajustes necesarios para continuar con nuestra ineludible responsabilidad de garantizar la fiscalización y transparencia en el financiamiento de las campañas políticas en la Isla”.  

El recorte propuesto va a afectar significativamente el total de las auditorías ya encaminadas y los procesos de fiscalización, lo que podría menoscabar el derecho de la ciudadanía a estar informados y conocer si los procesos de financiamiento de campañas se llevaron a cabo conforme a la ley, según Vélez

“La OCE tiene encaminadas 787 auditorías de un total de 934 comités que participaron en las elecciones del 2016. El total de auditorías será el más alto conseguido por una oficina fiscalizadora de campañas políticas en Puerto Rico”, expresó.

“El recorte anunciado representa un duro golpe al proceso de fiscalización de las finanzas electorales de los funcionarios electos y candidatos en el momento que más Puerto Rico lo necesita, en tiempos como los que enfrentamos, oficinas de fiscalización cobran mayor relevancia y lejos de ser debilitadas deben ser robustecidas ofreciéndoles las herramientas necesarias para que puedan servir de cortapisa a males como la corrupción y el inversionismo político”. enfatizó el contralor electoral.

Recordó que bajo la antigua Oficina del Auditor Electoral solo se llevaron a cabo cuatro y doce auditorías en 2004 y 2008, respectivamente. Mientras que, en el 2012 con la creación de la Oficina del Contralor Electoral y su independencia de la Comisión Estatal de Elecciones se aumentó significativamente ese número a 161 auditorías.

No obstante, el total de auditorías encaminadas para el cuatrienio 2016, que supera en 626 las del 2012, confirma que la independencia de la OCE hace posible una fiscalización adecuada de los comités políticos.