El proyectado Plan de Ajuste Fiscal responde a una fórmula o política que ha probado ser inefectiva en otros países donde ha provocado el empobrecimiento de los trabajadores.

Así lo señaló el economista argentino Julio César Gambina, quien presentó hoy, jueves, la conferencia "Crisis Económica en Puerto Rico: Causas y Efectos", en el anfiteatro de Estudios Generales del Recinto de Río Piedras, de la Universidad de Puerto Rico (UPR).

"Esto es un plan adecuado para los sectores hegemónicos, los sectores dominantes", sostuvo Gambina, especialista por varias décadas en integración y deuda externa, doctor en Ciencias Sociales, y profesor de varias universidades en Suramérica.

Aunque todavía el Gobierno no ha sometido un proyecto de ley en la Legislatura para encaminar propuestas del plan, las propuestas esbozadas por el ejecutivo representarán profundas reformas que afectarán las condiciones laborales de empleados en el sector público.

Gambina, mientras, dijo que, además del impacto directo en los trabajadores del gobierno por recortes operacionales, el cuestionamiento sobre el plan tiene que ir todavía más lejos. 

Señaló que todo el país se verá afectado en la medida en que los ajustes se realizarán con el objetivo de destinar más fondos públicos para pagar las deudas con bonistas, sin cuestionar la razón de ser de esas mismas deudas.

"Aquí les hablan de la crisis de Puerto Rico, pero si estuviéramos en Grecia sería la crisis griega. Si estuviéramos en Brasil, sería la crisis brasileña… En realidad es una crisis mundial y es mundial porque se origina en la principal potencia económica del mundo: Estados Unidos", indicó Gambina.

"Esta crisis mundial se está atacando desde los organismos mundiales, como el Fondo Monetario, Banco Mundial, con políticas de ajuste y de reestructuraciones regresivas que suponen cambiar las relaciones laborales, avanzar con los procesos de privatizaciones, favorecer el proceso de liberalización económica, que supone alentar la fuga de capitales y deteriorar las condiciones de desarrollo nacional de los diferentes países", agregó.

Recordó que en el caso de Argentina sucedió algo similar a lo que se plantea en Puerto Rico, cuando la situación se agravó a principios de la década pasada, y las autoridades  implementaron las recomendaciones como las que se han planteado para la Isla, sin resultados positivos.

"Las políticas son iguales. No debe sorprender que Anne Krueger por Puerto Rico, porque fue la representante del Fondo Monetario Internacional en la crisis del 2001", argumentó Gambina.

"Las propuestas fueron las mismas que se están proponiendo para Puerto Rico. Y Argentina, que es un país de alta industrialización, de desarrollo relativo medio, ahí la pobreza llegó al 60% de la población, el desempleo llegó a tasas del 22%, cifras muy fuertes", dijo. "Y muchas de esas consecuencias se viven hoy", aseguró.

Destacó que en el 2001 se le informó a Argentina que debía pagar $140,000 millones en deuda, pero señaló que hasta la fecha han pagado $200,000 millones y "todavía debemos $240,000 millones".

La conferencia de Gambina fue organizada por Unión de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), con el apoyo de una docena de otros sindicatos.

El presidente de la UTIER, Ángel Figueroa Jaramillo, dijo que la actividad forma parte de una serie de actividades que desarrollan para ofrecerle información a los ciudadanos en relación a los planes del gobierno para atender el problema de las finanzas públicas.