Pese al acuerdo alcanzado entre la presidenta de la Comisio´n Estatal de Elecciones (CEE), Liza M. Garci´a Ve´lez, y el comisionado del Partido Nuevo Progresista (PNP), Jorge Da´vila Torres, para evitar que sus diferencias se dilucidaran en los tribunales, la querella por alteración a la paz radicada por la primera no ha sido retirada. 

Así lo informó este viernes el comisionado novoprogresista en una entrevista radial (NotiUno), a una semana de que se divulgó en un comunicado de prensa el supuesto compromiso para que García Vélez le retirara la querella. 

“La querella no fue retirada”, soltó, sin explicar las razones por las que García Vélez no ha cumplido con el acuerdo. 

De paso, evitó hablar del encontronazo que tuvo con la presidenta de la CEE.

Este diario se comunicó con la relacionista pública de García Vélez, Helga García, para conocer qué ha pasado con la querella. Aceptó que por complicaciones en la agenda de la agente que tomó la querella y la presidente de la CEE no se ha culminado el proceso para retirar la querella. 

“El compromiso se mantiene. Ella la semana pasada llamó a la guardia, la guardia estaba libre, cuando la guardia vino aquí, la presidenta no estaba, y hoy está en gestión de retirar la querella, tal cual fue el acuerdo”, dijo la relacionista pública. 

Según un escueto comunicado de prensa emitido el pasado viernes por García Vélez y Dávila Torres, los funcionarios se reunieron de forma privada para discutir el incidente que provocó la radicación de la querella policiaca. En ese encuentro, se determinó dar por terminada la disputa y no hacer más comentarios públicos sobre eso.

La situación que provocó esta desavenencia entre Garci´a Ve´lez y Da´vila Torres surgió el jueves, 6 de noviembre, tras surgir un altercado durante una reunión para observar el funcionamiento de las máquinas del escrutinio electrónico, en la que estuvieron presentes otros funcionarios de la CEE.

En ese momento, la presidenta de la CEE dijo en una declaraciones escritas que “las palabras soeces y la actitud de confrontación y violenta en un ambiente laboral y contra mi persona inhabilitan al comisionado Dávila a continuar en su cargo, por lo que estoy solicitando su renuncia. Estamos comenzando los procesos electorales enmarcados en una crisis fiscal y no voy a tolerar un ambiente de trabajo hostil que altere la tranquilidad de todas y todos los que laboramos en la CEE, que merecemos ser tratados con respeto”.