La mujer que se querelló por acoso sexual contra el vicepresidente de la Cámara de Representantes, José “Pichy” Torres Zamora, se reafirmó hoy en sus imputaciones contra el legislador previo a comparecer ante la Comisión de Ética de este cuerpo legislativo

“Entiendo que al fin se me va a escuchar para yo decir la verdad que es la que he estado diciendo desde siempre”, dijo la querellante a periodistas antes de declarar en una vista a puerta cerrada de la comisión de ética en el edificio Luis A. Ferré, en el Capitolio.

La mujer denunció en agosto que un empleado de Torres Zamora la obligó a tener sexo oral con él como condición para mantener su empleo en la Cámara y que el legislador le dijo en una reunión que "eventualmente va haber campaña, vamos a quedarnos en algunos pueblos y eventualmente tu y yo vamos a tener sexo”, sostuvo.

“Esto es un abuso de poder y ninguna mujer en Puerto Rico debe pasar por esto…a las mujeres que no callen. Yo lo hice por vergüenza y por mi familia” sostuvo con voz quebrada la mujer, que llegó acompañada del abogado Antonio Figueroa.

Su abogado dijo que la mujer mantiene su cabeza en alto. "Vamos para adelante esto no se puede quedar en la costumbre de que la gente se cansa y no vuelve, y las personas que hacen o no hacen y dejan de hacer quedan bien", expresó Figueroa.

La mujer dijo que estaba desempleada y que ha pasado por momentos de mucha depresión.

“Esto ha marcado mi vida bastante”, dijo la alegada perjudicada, quien pidió como condición para hablar que su rostro no fuera captado por las cámaras.

Por su parte, Torres Zamora indicó antes de entrar a la ausencia que no tenía comentarios. Llegó acompañado de la abogada Ivelisse Rivera Padilla.