El secretario de Desarrollo Económico y Comercio (DDEC), Manuel A. Laboy Rivera, advirtió hoy que la prohibición del uso beneficioso de cenizas provenientes de la combustión de carbón para producir energía en la isla, tendrá un impacto "devastador" para varios sectores de la economía local.

Según alegó Laboy Rivera en un comunicado, el prohibir "los usos beneficiosos" del residuo de combustión de carbón provenientes de la planta de generación de energía Applied Energy Systems (AES) y que la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) ha descrito como "no peligroso", provocaría un incremento en los costos de energía eléctrica.

"Un incremento en el costo de energía conlleva el aumento en los costos de hacer negocios en Puerto Rico, lo que entorpece los urgentes esfuerzos de atraer nueva inversión en Puerto Rico, apoyar a las pymes, aumentar las exportaciones a mercados globales, y crear nuevos empleos bien remunerados", advirtió Laboy Rivera.

"Apoyamos el desarrollo económico sustentable, siempre poniendo la salud del pueblo y la protección del medio ambiente como prioridad en balance con el crecimiento económico y la creación de los empleos que tanto necesita nuestra gente", añadió.

Laboy Rivera hizo estas expresiones días después de que cientos de camiones de la AES se movilizaran a la planta Peñuelas Valley Landfill para depositar cenizas livianas, conocidas como agremax - una mezcla de agua con el residuo de carbón sometido a combustión- para producir energía en vertederos de la isla.

El funcionario dijo además que la prohibición incrementaría la disposición de desperdicios líquidos al sector de manufactura de alta tecnología y ciencias vivas, "una industria muy importante para Puerto Rico", la cual representa un 22 % de la economía (23.000 millones de dólares y 18.000 empleos directos), según Laboy Rivera.

"La industria farmacéutica sufriría este efecto y haría a la isla menos competitiva para retener esos empleos", sostuvo Laboy, quien dijo además que la exclusión impactaría la industria del cemento y de construcción en Puerto Rico.

"En la isla se importan residuos de cenizas para la confección de mezclas especiales para la construcción de carreteras, autopistas y otros proyectos relacionados", detalló el funcionario.

Laboy Rivera mencionó que el año pasado, aproximadamente 7,000 toneladas de cenizas se importaron para la producción de cemento en Puerto Rico, y el consumo llegó a ser cerca de 100,000 toneladas en el año 2006.

El también director ejecutivo de la Compañía de Fomento Industrial (PRIDCO, por sus siglas en inglés) dijo además que estos residuos de combustión son útiles en otras aplicaciones de valor comercial a nivel global, como la manufactura de materiales de construcción.

Ante esto, Laboy Rivera dijo que el Gobierno de Puerto Rico realiza esfuerzos para establecer una empresa, que podría ser Verde Panel, para que utilice las cenizas para la manufactura de paneles de construcción, producidos con residuos de combustión de la empresa AES.

"Estos paneles se exportarán a mercados globales para la construcción de hogares de bajo costo. Verde Panel también exportará estos paneles al mercado estadounidense para aplicarse en la amortiguación de ruido en aeropuertos y autopistas", dijo Laboy Rivera, quien aseguró que la instalación de dicha empresa crearía 100 empleos.

"Con este proyecto podremos cumplir en poco tiempo con la nueva política para exportar fuera de la isla todas las cenizas que produce la planta AES, aunque no sean perjudiciales al ambiente y la salud", afirmó.