En medio de las denuncias y alegaciones que han surgido en su contra tras ser identificada por Anaudi Hernández como una de las personas a quien él le entregó dinero, la senadora Mari Tere González no desmintió las expresiones alegando que hay una orden de mordaza.

En declaraciones escritas, González pidió "consideración" y dijo que está "evaluando" lo que está ocurriendo"

"En estos momentos estoy evaluando con mucha responsabilidad esta situación y no haré expresiones por el momento. Como todos sabemos, hay una orden de mordaza impuesta por el Tribunal a los testigos de este caso. Pero sin duda me expresaré en su momento.", dijo González.

Relacionadas

A principios de mes la senadora fue identificada como una de las 57 testigos de la fiscalía en el llamado caso Anaudi y en octubre pasado declaró ante el gran jurado federal en la investigación que culminó en diciembre en la acusación contra 10 personas por un esquema de fraude de $2.1 millones orquestado por Hernández, exrecaudador del Partido Popular Democrático (PPD). Cuatro de los acusados no se declararon culpables y están enfrentando juicio desde la semana pasada, y en ese proceso judicial Hernández comenzó a testificar ayer, y mencionó a la hoy senadora.

Según declaró ayer, Hernández ayudó a la senadora en su campaña para el senado por el distrito Mayagüez-Aguadilla, y luego la electa legisladora hizo gestiones de cabildeo a favor de los nombramientos de Sonia Barreto a la vicepresidencia de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) y Sally López, quien fue designada a la Administración de Desarrollo Laboral (ADL).

Esto ha causado reclamos de que David Bernier saque de la papeleta a González y que el Senado refiera a la Comisión de Ética a la legisladora. En sus declaraciones escritas, la senadora tampoco aborda estos temas.

"Mi hoja de servicio al País está en récord, permítanme evaluar este escenario con más detenimiento y agradezco la consideración para expresarme", dijo González en sus escuetas declaraciones.