Miami - Una mujer dejó una propina de $900 a una camarera de un restaurante en Phoenix (Arizona), acompañada de una nota en la cuenta en la que decía que era "dinero que Dios le había dado" para dárselo a ella, publicaron medios nacionales.

Sarah Clark dijo que le venía muy bien el dinero para pagar las cuentas en momentos en que su prometido no puede trabajar debido a una cirugía en la rodilla, además de que ella no recibirá remuneración del trabajo cuando sea el parto y nazca su bebé.

"Uno siempre escucha que estas cosas pasan, pero no espera recibirlas", dijo al canal CNN la mujer, que está a punto de dar a luz a Rosalie.

Clark dijo que había hablado varias veces con su benefactora, que había ido al restaurante y también está embarazada.

A la cuenta de la comida, por $61.30, la clienta agregó los $900 de la propina.