Imagine que sus padres se divorcian y lo abandonan junto con sus dos hermanos. Para sustentarse, decide buscar trabajo, pero uno solo no basta para pagar los gastos familiares, así que consigue dos trabajos: uno a tiempo completo y el otro a tiempo parcial. Esto sin contar que tiene que asistir a la escuela pues apenas tiene 17 años.

Así las cosas, las autoridades locales lo obligan a pagar una multa de $100 y pasar 24 horas en la cárcel por no haber asistido regularmente a clases.

Esto le sucedió a Diane Tran. Una joven alumna de la Willis High School en Houston, Texas.

Según el portal de noticias Khou.com, la estudiante de honor y quien cursa clases a nivel de bachillerato, se sentía exhausta frecuentemente por lo que se le hacía imposible levantarse a tiempo para asistir a clases.

Asimismo, indicó que tenía que ayudar a su hermano mayor, quien estudia en la Texas A&M University y a su hermana menor que vive con unos parientes. Su madre reside en el estado de Georgia.

“Si dejas a un estudiante que falta regularmente a la escuela suelto, ¿qué harás con el resto, dejarlos ir?”, cuestionó la jueza Moriarty, quién impuso la condena.

Actualmente, Tran vive con la familia de uno de sus empleadores.